Jaime Anguita, el viudo de Viviana Haeger, tiene demandado al fisco de Chile por 2 mil millones de pesos.
En su última jugada, el ingeniero sacó a la luz un sumario interno de la PDI de más 1.600 páginas, donde además de revelarse todos los errores que la policía cometió en el caso de su esposa, también se dan a conocer detalles íntimos de su vida personal.
Dicho sumario, que podría ser su carta ganadora en la demanda, fue presentado en agosto pasado por el abogado de Anguita, ante el Segundo Juzgado Civil de Puerto Montt.
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En el informe revelado por la Unidad de Investigación de BioBioChile, se van enumerando las negligencias cometidas en la investigación, donde seis funcionarios fueron sancionados administrativamente, y uno de ellos terminó siendo destituido de su cargo.
El primero de ellos es Javier Vega, encargado de revisar la buhardilla de la casa familiar donde apareció el cuerpo de Viviana Haeger, el 10 de agosto de 2010, luego de más de un mes de búsquedas.
“De propia iniciativa ingresé medio cuerpo a esa mansarda con la finalidad de ver en el interior, pero como estaba muy oscuro y no tenía una linterna no logré apreciar nada que pudiera ser relevante. Misma acción que efectuó el comisario (Jaime) Muñoz y el subinspector (Pablo) Alegría“, declara en el sumario.
El comisario Muñoz confirma el relato, pero se contraponen en dos puntos: la iniciativa propia y la linterna.
“Le correspondió revisar al inspector Javier Vega y al subinspector Pablo Alegría. Les ordené expresamente que revisaran los dormitorios, debajo de las camas, entretecho y la mansarda. Recuerdo haberle dado la instrucción específica al inspector Vega que revisara la mansarda, ya que él andaba con una linterna de su propiedad“, precisa Muñoz.
Pablo Alegría, por su parte, declara que subió hasta el segundo piso y vio que el dormitorio se encontraba desordenado.
“Lo que me llamó la atención fue que la cama del señor Anguita estaba corrida de su ubicación original. Sobre esta había documentación desordenada, además me pude percatar que en el otro sector de la pieza, junto al clóset que también estaba desordenado, había en la pared una puerta de acceso”, explica.
Tras ver la mansarda, decidió no ingresar porque ya había sido inspeccionada, según la versión de sus colegas.
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Algo similar le ocurrió a Jorge Márquez Monsalve, jefe de la Brigada de Homicidios (BH) de Puerto Montt, quien en su testimonio, asegura que preguntó si el dormitorio había sido revisado, y le respondieron que sí (no recuerda quién).
El prefecto Juan Francisco Galleguillos era jefe de la Prefectura de la provincia de Llanquihue, y encargado de la investigación.
Aquella tarde de la desaparición (29 de junio de 2010) les preguntó al comisario Jaime Muñoz (Bicrim), Yanko Olmedo (Brigada Investigadora de Robos, Biro) y Jorge Márquez (BH) si habían revisado la casa, y todos respondieron que sí.
“Debo señalar que dispuse que funcionarios de la Biro y BH Puerto Montt, apoyaran la labor de la Bicrim Puerto Varas, pero nunca se formó un grupo multidisciplinario“, detalla.
Lo anterior fue otro de los principales problemas de la investigación. Así lo determinó el cierre del sumario administrativo, al concluir que los seis funcionarios fueron negligentes. Sobre todo el prefecto Juan Francisco Galleguillos por su falta de “organización, planificación y dirección del trabajo”.
Detalles de la vida personal de Jaime Anguita
Otra de las conclusiones a las que se llegó, fue que la indagatoria se basó en ideas preconcebidas de los policías, como la tesis del secuestro, dejando de lado otras líneas investigativas.
Cabe señalar que otro de los argumentos expresados en la demanda de Anguita, son los detalles personales que salieron a la luz, incluidos datos de su vida sexual y amorosa.
Con la documentación buscan acreditar el “daño inconmensurable” del que dice ser víctima el viudo de la contadora.
