Una verdadera pesadilla sufrieron los habitantes del Cajón del Maipo durante la noche del pasado sábado. Esto producto del aluvión que arrasó con varias viviendas en el sector.

Doris Araya fue una de las personas más afectadas, cuya casa ubicada en El Melocotón, terminó sumergida entre el barro y los escombros.

Arranqué por una ventana y subí al techo de la casa de mi vecina. Todo se movía. Ese ruido jamás se me olvidará, pensé que me iba a volar”, declaró la mujer en conversación con el diario Las Últimas Noticias.

De ese modo, cuando sintió que todo se había calmado, se bajó del techo. “Vivo hace 36 años en este lugar y jamás las lluvias habían provocado este nivel de daño”, indicó Doris, quien trabaja como maestra de cocina en un restaurante en San Alfonso.

Asimismo, destacó que ese sector era llamado por los habitantes como “el gigante dormido”, ya que era el único estero que no se había inundado.

Por otra parte, y a pesar de que el barro llegó a casi un metro de altura al interior su casa, Doris se negó a abandonar el lugar. “Quiero quedarme y limpiar mi hogar. Aquí está el recuerdo de mis hijos, ambos fallecieron el año pasado”, admitió.

Cabe señalar que la noche del pasado sábado, Doris durmió en un albergue en el cuartel de bomberos de El Melocotón. A la mañana siguiente, la mujer se dirigió hasta su casa y con al ayuda de 10 vecinos, comenzó a remover escombros y barro.