A quién no le ha pasado que en alguna tienda del retail se ha visto tentado a comprar algún artículo bajo un letrero que dice algo así como “¡Gran descuento! Sólo por $9.990”. Sin embargo al acercarnos, una pequeña frase bajo el precio desmorona el entusiasmo al decir “sólo con su tarjeta Master Plop”, como diría el humorista Daniel “Bombo” Fica.

Pues bien, esta práctica habitual en las distintas tiendas del retail están por terminar luego que el Congreso aprobara una de las distintas iniciativas que pretenden mejorar la Ley del Consumidor.

Se trata de los “descuentos atados” asociados una tarjeta de crédito que por lo general es administrada por el mismo holding dueño de esa tienda de retail.

La regla general en nuestro ordenamiento jurídico es que los productos o servicios financieros no se podrán ofrecer de manera atada. No obstante, existía una excepción que daba “derecho” al proveedor a “ofrecer descuentos o beneficios adicionales asociados exclusivamente a un medio de pago administrado u operado por cualquiera de los sujetos señalados”.

Consultados algunas empresas del retail, como Cencosud y Walmart, declinaron referirse al tema.

La tramitación

El texto fue aprobado por la Cámara de Diputados y también aprobado en los mismos términos por el Senado el miércoles 2 de diciembre.

Sin embargo, este artículo forma parte de un proyecto que es mas grande y sobre el cual ha habido diferencias entre la Cámara y el Senado. Sobre esos temas es que se pasó a un tercer trámite, en donde los diputados tendrán que votar si acepta o rechaza las modificaciones que hicieron los senadores, y en el caso de que las rechace, se va a comisión mixta donde se discutirán solo las modificaciones.

De esta forma, el trámite legislativo respecto a la norma que elimina los descuentos asociados a tarjetas de crédito prácticamente ya llegó a su fin y no se puede modificar en el Congreso.

Así, por ahora sólo queda esperar la votación de la Cámara para su total despacho y ser finalmente promulgado como Ley por el presidente Sebastián Piñera.

Ofertas “disfrazadas”

Según el autor de la iniciativa para terminar con los “descuentos atados”, el diputado independiente Karim Bianchi, si bien el consumidor entiende que está comprando una oferta, en el fondo esta práctica esconde la venta atada de un crédito, de gastos de mantención y de seguros asociados.

Y además se está discriminando arbitrariamente entre quienes cumplen o no los requisitos para acceder a determinada tarjetas.

“Tenemos un país súper endeudado en el tema de las tarjetas de crédito, en especial, grupos que son altamente vulnerables, por ejemplo se le está entregando tarjeta sin mucho requisito a gente joven o adultos mayores”, sostuvo.

“Son grupos que tienen fuerte dependencia y sobre todo tarjetas que, a diferencia de las bancarias, tienen condiciones que son bastante desfavorables”, estimó el parlamentario.

“Si hacemos un diagnóstico del endeudamiento en Chile, yo creo que gran parte del endeudamiento es porque estas tarjetas tienen condiciones que disfrazándose de oferta, han desnaturalizado un negocio, el mercado de la venta de productos, disfrazándolo para en el fondo transformarlo en un negocio del mercado financiero”, cuestionó Bianchi.

Tiembla "Master Plop": Iniciativa termina con los "descuentos atados" en el retail
ARCHIVO | Francisco Castillo | Agencia UNO

Guerra de ofertas

Respecto a los alcances de esta indicación una vez que el proyecto completo termine su tramitación en el Congreso, el diputado por Magallanes descartó efectos negativos.

“A diferencia de lo que algunos creen que con esto se acaban las ofertas, yo creo que no, las ofertas tienen un fin que es entregar un producto a un menor valor y eso está desde que el comercio es comercio”, afirmó.

En ese sentido, apuntó a que el comercio va a tener que modificar sus técnicas, lo que va a terminar beneficiando a los consumidores.

“Van a tener que tener otros métodos de fidelización, a través de puntos, de ofertas reales. Pero lejos de dañar la oferta, van a aumentarla, porque estas empresas van a tener que salir al mercado no con ofertas disfrazadas que incluso son bajo el valor del precio real del producto, porque lo que buscan no es la venta, sino captar un tarjetahabientes”, señaló.

“Vamos a iniciar una guerra de precios con esta indicación y quienes van a salir beneficiados con esta indicación van a ser los consumidores”, pronosticó Bianchi.

Los cuestionamientos

Parte de los cuestionamientos vienen de la propia oposición. La senadora DC Ximena Rincón, aseguró que en su oportunidad la comisión rechazó esta idea porque “va contra de la libre competencia y terminará afectando a los consumidores”.

“Es muy peligroso, porque se traducirá en una significativa reducción de los descuentos que se ofrecen tanto en cantidad como en monto (…) el comercio ya no tendría los mismos incentivos para ofrecer descuentos que nacen porque los establecimientos buscan fidelizar al cliente en sus compras”, opinó.

En ese sentido, la parlamentaria falangista apuntó a un informe de la Fiscalía Nacional Económica que desaconsejó la iniciativa, indicando que “podría reducir las promociones y el acceso al crédito de los segmentos medios y bajos”.

“Esta indicación tiene visos de constitucionalidad”, advirtió Rincón.

Una tramitación difícil

En ese sentido, Bianchi reconoció las dificultades por las que pasó esta iniciativa, principalmente por el rechazo del Gobierno.

“El Gobierno ha estado en total contraposición de nuestra postura, tal es así que presentó en el Senado un artículo para reemplazar el artículo que propusimos en la Cámara de Diputados, por eso pedimos votación separada para rechazar el artículo del Gobierno”, puntualizó.

“Lo que se aprobó en la Cámara de Diputados fue cambiado por el Gobierno y eso fue rechazado en el Senado. De hecho, recuerdo que los ministros y los subsecretarios estaban de cabeza en los pupitres de los diputados de Gobierno tratando de cambiar la votación”, acusó.