La Corte de Apelaciones de San Miguel ordenó dejar en libertad a Roberto Campos, el profesor universitario que permanecía desde el 30 de octubre en prisión preventiva tras ser acusado de causar daños la estación del Metro San Joaquín.
La tarde de este lunes, el docente dejó la cárcel de alta seguridad donde estuvo 56 días recluido. En esta instancia se dirigió a la prensa y agradeció a quienes lo apoyaron durante este periodo.
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“Quisiera agradecerle a muchas personas que sin conocerme me apoyaron, a mi familia, al colegio de profesores, al colectivo feminista, y un montón de gente más que me apoyó y que marchó conmigo, estoy completamente agradecido”, señaló Campos.
Asimismo, reconoció que se sintió como “un chivo expiatorio”. “Eso fui, porque me encarcelaron, el castigo fue desproporcionado”, expresó el profesor.
Con respecto a la periodo que pasó tras las rejas, señaló: “Fue atroz. Estuve el 88% del día encerrado. Fui tratado con cierta empatía, porque los funcionarios sabían que yo no era y no soy un delincuente”.
“Fue espantoso que te arrebataran la libertad, de una forma tan intempestiva. Este lugar yo no se lo deseo a nadie, ni siquiera al asesino que mató a mi padre cuando yo tenía 5 años. Ni siquiera a él le deseo tantos días de presidio en este lugar”, admitió.
Finalmente, el profesor reveló que compartirá su testimonio a través de un canal de Youtube.
