Cuando se iniciaron las movilizaciones en Chile hace unos días, uno de los episodios más destacados fueron los ocurridos el pasado 19 de octubre, donde cinco buses del Transantiago fueron quemados en Santiago.

Esto acaparó todas las portadas de los medios y las redes sociales, donde se comenzó a gestar una particular duda. Esto porque muchos pensaron que se trataba de un montaje realizado por el Gobierno o por Carabineros, para criminalizar el movimiento social.

De hecho, esta teoría comenzó a crecer cuando un cibernauta buscó las patentes de las micros afectadas en la aplicación iBus, y se encontró con la sorpresa de que no había información de los vehículos, ni de los recorridos. Esto di pie para que se pensara que habían sido puestas a propósito en ese sector.

Bajo este argumento, se aseguró que las máquinas estaban dadas de baja, y además, se sospechó de la ubicación en la que fueron ubicadas en la calle. Por lo mismo, BioBioChile buscó información al respecto, y confirmó que no se trató de ningún montaje, como se pensó en redes sociales.

En el Registro Nacional de Transporte Público y Escolar del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT) se menciona que ambas micros se encuentran vigentes. Además, se detalla a qué máquinas reemplazaron cuando se incorporaron al servicio.

Ahora bien, ¿por qué aparecían con ‘información no disponible’ en la aplicación iBus? “El sitio de iBus, que no está asociado a nuestros canales oficiales, busca las patentes de acuerdo a los servicios que están en recorrido en ese minuto. Luego, arroja el tiempo de llegada del bus al paradero. Si el bus no tiene servicio asignado, no tienen patentes disponibles”, respondieron desde el MTT.

En este sentido, como eran buses que están prestando apoyo al servicio del Transantiago, por la quema de las estaciones de metro, no estaba incorporado a la base de datos de iBus.

Por otro lado, respecto al curioso orden en que quedaron los buses abandonados, The Clinic entrevistó a dos testigos. Uno de ellos relató que “los choferes se bajaron también así como ya chao con esta hueá, hagan lo que quieran (…) Y ahí las empezaron a quemar. Quemaron una micro, y después quemaron otra, y después quemaron otra. Fue harto rato, estoy hablado de por lo menos veinte minutos”, reveló el medio.