Tras 16 meses de búsqueda, finalmente el pasado lunes se encontró el cuerpo de Fernanda Maciel en la bodega de Conchalí. La joven de 21 años tenía 7 meses de embarazo cuando desapareció.
La mañana de este martes, se llevó a cabo la formalización del único detenido en el caso. Se trata de un amigo y vecino de la víctima, Felipe Rojas.
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Paola Correa, madre de Fernanda, llegó hasta el Centro de Justicia acompañada de sus hijas y otros familiares. Un detalle que no pasó inadvertido, fue la fotografía que la mujer portaba en sus manos.
La simbólica imagen corresponde a una selfie que Maciel se tomó frente a un espejo, y donde mostraba su avanzado embarazo, con el abdomen descubierto.
La fotografía tiene un gran significado para su madre, ya que fue usada en los primeros carteles de búsqueda de “Fer”, y además, se despidió de ella publicándola en su cuenta de Facebook.
“Siempre estarán en mi mente, vida y corazón descansen en paz mis amores las amo (…) Vuelen alto princesitas mías, siempre en mi mente y corazón…las amo”, agregó, en otra de sus publicaciones”, señaló Correa tras enterarse del hallazgo.
Cabe señalar que los acompañantes de Correa también portaron la fotografía durante la formalización y las dejaron sobre los asientos.
