Un verdadero martirio es el que están viviendo más de 700 familias en situación vulnerable de Temuco, Padre Las Casas y la localidad de Labranza, quienes podrían perder el subsidio para la casa propia.

Lo anterior podría ocurrir por una particular razón: por no contar con recursos para adquirir una estufa no contaminante.

La consejera regional, Ana María Soto, denunció el caso de 382 familias de comités habitacionales de Labranza en la comuna de Temuco, quienes aseveran no haber sido advertidas que están sujetas al Plan de Descontaminación de Temuco- Padre Las Casas.

Este plan les exige como requisito para postular a sus viviendas, adquirir un calefactor no contaminante, ya sea a gas o pellet, que tiene un costo aproximado de 800 mil pesos.

Para la consejera regional, la situación reviste particular gravedad, pues no sólo afecta a las familias de Labranza, sino a otras comunas de La Araucanía donde existen problemas de contaminación, por lo que la cifra total de afectados puede ser mucho mayor.

Ana María Soto propone que para evitar que las familias pierdan su subsidio habitacional a causa de no contar con la estufa, es necesario que el Estado se haga cargo de este requisito, ya sea aportando directamente mediante un subsidio o exigiendo a las empresas constructoras que las viviendas sean entregadas con los calefactores incluidos.