La jornada de este lunes, se confirmó que la identidad del torso que fue encontrada flotando en Valparaíso, corresponde a Nibaldo Villegas, profesor estaba desparecido hace 10 días. La última vez que lo vieron, le dijo a sus familiares que saldría a una reunión social.
Aquella nochde del pasado 10 de agosto, el docente dejó en ese lugar a su hija, a la que pasaría a buscar después, según consigna TVN.
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El profesor de computación que trabajaba en el Centro de Educación Integrada de Adultos (CEIA) de Quilpué, estaba separado hace algún tiempo, e incluso se encontraba en un proceso de divorcio, luego de que su esposa lo dejara, tal y como señalan al sitio La Estrella de Valparaíso.
Al día siguiente, el hermano del docente llegó hasta su casa para saber qué ocurría con él. En el lugar encontró las puertas cerradas y el auto estacionado con el trabavolante puesto. Tras insistir a la puerta, sin respuestas, el hombre sacó un ventanal para entrar al inmueble.
Al interior de la casa, encontró pistas bastante sospechosas. La chaqueta que usaba esa noche estaba guardada, las llaves estaban colgadas detrás de la puerta y las cosas que iba a llevar a la junta social todavía estaban ahí. Además, había un vaso roto en el piso, tal y como consigna el sitio BioBioChile.
En este contexto, la familia del fallecido se enteró que la reunión no estaba agendada para ese día, sino que para el sábado. Todavía se desconoce si se trató de una confusión de fechas o efectivamente Villegas inventó una excusa para quedarse solo. Una vecina del profesor aseveró que aquel día escuchó ruidos muy fuertes en la casa.
Posteriormente, la exesposa llegó a casa con una mochila, según contaron familiares. De acuerdo al relato del hermano de Villegas, la mujer se puso a llorar cuando él le prohibió quedarse. “Dijo que era su casa y que era su marido. Y yo le dije que no, porque ahora (de repente) era su marido”, sentenció al matinal de TVN.
