Rigoberto Martínez lleva más de 20 años alegrando a niños y niñas en situación de vulnerabilidad en época de Navidad. El Viejito Pascuero de Valparaíso, como es conocido en su ciudad, ha pasado por difíciles momentos este año.
Fue damnificado del megaincendio del 2014. En esa ocasión, perdió su casa en el cerro Las Cañas, su familia se alejó de él y actualmente sufre una grave artrosis.
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A pesar de todo lo malo que está viviendo, muestra una actitud optimista y sólo espera que el Serviu acelere los procesos para tener su vivienda definitiva, tal y como señaló al diario La Estrella de Valparaíso.
“Mi casa en gran parte está lista, de hecho, tuve que decirle a una prima que se fuera a cuidar por que se estaban robando las cosas. El problema es en los accesos, no tengo muro de contención y tampoco escalera principal. Me han dicho que están en proceso de estudios, licitaciones y también que faltan recursos. Por el momento acá estoy arrendando una pieza desde que perdí mi casa”, declaró Rigoberto.
La lucha por conseguir su vivienda no ha sido fácil. Incluso cuando se cumplió un año del incendio amenazó con quemarse a lo bonzo en plena Intendencia Regional, para exigir respuestas de las autoridades ante las pérdidas de sus casas.
Este hombre ha brindado mucha alegría a cientos de niños. “Muchas veces de mi propio bolsillo he comprado obsequios para conseguir aquellas sonrisas que fortalecen el alma y lo seguiré haciendo porque es mi forma de aporta a esta sociedad”, expresó el Viejito Pascuero de Valparaíso.
