La India es el segundo país más poblado del mundo tras China. Con más de mil 200 millones de habitantes y tradiciones milenarias y arraigadas en una sociedad compleja , donde las castas son eternas, muchas veces ocurren hechos inexplicables e inaceptables para el mundo occidental, por ejemplo, las normas y sanciones, que son, generalmente, muy severas, sobre todo con las mujeres.
Esto quedó nuevamente demostrado luego de que una niña de 13 años fuera castigada a recibir latigazos luego de no confesar inmediatamente que había sido violada por su padre.
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Un consejo tribal, en la aldea de Jawalwadi, en el estado de Maharashtra, en el Oeste India y donde se ubica también la conocida ciudad de Mumbai, consideró indecente el comportamiento de la adolescente por lo que aplicó el salvaje castigo.
Lo insólito, desde nuestra perspectiva de occidente, no termina ahí, ya que no sólo sancionaron a la niña, sino que justificaron a su padre, que confesó, porque estaba ebrio al momento del ataque y volvieron a denunciar a la menor por no haberlo delatado de inmediato y decir mentiras. Aunque tampoco le salió gratis al hombre, que recibió 15 latigazos de sanción.
A pesar del perdón de los ancianos de la aldea, el hombre si fue denunciado a la policía por agresión sexual, mientras que su hija fue atada a un árbol y azotada con ramas según consignó el Washington Post.
Fue un activista quien entregó el video, que no ha sido difundido, al medio norteamericano, que además obtuvo declaraciones de la menor, que asumió su culpa en los hechos, en una muestra de como la sociedad machista y patriarcal domina la India.
“No me hicieron daño. Yo pedí que me golpearan por que estaba en ‘pecado’. Mi falta fue no decirle a nadie en casa lo que había pasado. Dije que mi padre sólo había tomado mi mano. Ese fue mi error”, declaró la pequeña de sólo 13 años.
