Un avión de la aerolínea árabe Daallo volaba desde Somalía hasta el país africano de Yibuti, cuando ocurrió lo impensado: algo estalló en la cabina de pasajeros, generando un enorme agujero y despresurizando la cabina.
El hecho ocurrió cuando volaban a más de 300 metros de altura y obligó a hacer un aterrizaje de emergencia, como recoge el medio estadounidense New York Post.
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La explosión ocurrió poco tiempo después del despegue y 75 personas debieron ser evacuadas. En un comienzo, se creía que sólo habían dos heridos entre los pasajeros, pero la gente a bordo afirmaba que un hombre fue succionado por el agujero…
Posteriormente, se encontró el cuerpo de un hombre de la tercera edad en la ciudad de Balad: se cree que se trataría del pasajero que fue absorbido por el agujero y que cayó a 300 metros de altura. “La persona perdida cayó y fue encontraba en un distrito de Bal’ad, en medio de la región de Shabelle”, declararon las autoridades.
“Creo que fue una bomba. Por suerte, los controles no se dañaron tanto y pude volver y descender en el aeropuerto. Perdimos la presión en la cabina. Por suerte llegamos bien”, declaró el piloto, Vladimir Vodopivec, de nacionalidad serbia. El caso está siendo investigado, pero de momento, se pilló un “artefacto” adherido a la parte del avión que se desprendió.
