El drama de viñamarina: Le robaron foto de Facebook para ofrecerla como ‘escort’
Días de terror ha vivido Sonia, una profesora de educación básica de Viña del Mar, luego de que le robaran una foto en Facebook para, posteriormente, hacerla pasar como escort, utilizando la misma imagen para promocionar sus ‘servicios’ en un conocido sitio web.
La fotografía fue titulada como “Sonia rubia” y se adjuntaba un erótico texto dirigido a separados o divorciados y además el número de su celular personal.
“El anuncio figuraba en la sección ‘servicios’…no era explícito, pero más abajo decía’¿estás divorciado, separado, necesitas compañía? Sonia puede acompañarte en estos momentos difíciles’. Era un tipo de anuncio de servicios sexuales o de escort ¡y con mi fotografía y mi celular!”, comentó esta mujer a La Estrella de Valparaíso, pidiendo reserva de su identidad.
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Una situación que se volvió dramática desde el momento en que comenzó a recibir las primeras llamadas, sin entender, ni por un segundo, lo que estaba pasando.
“Me preguntan por ‘el anuncio’ entonces respondo qué anuncio y me dicen ‘el que está en Viva Street’. Cuando requerí más información me dijeron que era complicado y que mejor me metiera a la página para ver el anuncio donde salían mi nombre y mi celular”, aseguró la profesora.
Denunciante | Whatsapp
VivaStreet
Mensajes de todo tipo comenzaron a llegar a su Whatsapp, afectando profundamente a Sonia, que aún no encuentra respuesta a esta situación.
“Yo no tengo enemigos, de verdad que es de película, pero llegar a esto…imagínate tener que leer mensajes del tipo ‘cuánto cobras?’, ‘ estás disponible?’…te sientes totalmente vulnerada teniendo tu fotografía, todas las demás imágenes son, perdonando la expresión, tetas y potos. La única fotografía publicada es la mía, yo con lentes”.
Ante la compleja situación que vulneró su integridad y la dejó expuesta, la mujer, madre de dos hijos adolescentes y casada hace más de 15 años, pidió asesoría legal y concurrió a la PDI, donde acogieron su denuncia pero no como “suplantación de identidad”, sino que como “otros hechos”.
Por otra parte, la afectada logró contactarse con el portal y dar de baja la publicación, sin embargo no accedieron a darle más información, a pesar de que, según confiesa, la tiene y sólo se la entregaran al fiscal en caso de solicitarse.
“Me acogieron la denuncia, hicieron copia de la publicación que figuraba en internet que en ese momento tenía alrededor de 230 visitas y yo buscando apoyo para saber qué hacer (…) En la PDI me dijeron que dependerá del fiscal si esto se investiga o no (…) Lo que yo no quiero es que esto quede impune y haré todo lo que esté en mis manos para que así no ocurra. Yo hasta el día de hoy sigo recibiendo llamados”, comentó la maestra.
Por motivos de seguridad Sonia debió mejorar y cambiar las características de privacidad de su Facebook y aún piensa si cambiar o no su número, ya que lo tiene hace ya una década.
Un hecho lamentable que, además de vulnerar a esta pobre mujer, deja al descubierto las deficiencias no sólo de las redes sociales, sino que de las leyes que debiesen protegernos ante este tipo de delitos.
