Ester Roa Rebolledo, principal coliseo de fútbol de la Región del Bío Bío y uno de los más grandes del país, está viendo en peligro los trabajos de remodelación por un problema muy particular.
En días anteriores, la ministra del Deporte, Natalia Riffo, había fiscalizado las obras y cifró en 70% el avance del recinto que cobijará partidos del torneo continental.
Sin embargo, este viernes las faenas se paralizaron a raíz de la huelga que iniciaron los trabajadores que en jornadas anteriores trabajan sin cesar. Ellos, acusan estrés laboral, además de solicitar que sus pagos sean aumentados en un 20%, informó diario La Tercera.
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Ya serían 50 obreros adheridos a la movilización. Parece una cifra menor considerando que hay aproximadamente mil dedicados a las obras de remodelación, sin embargo, aquellos que están completamente inactivos estarían apagando los tableros de electricidad para interferir en las tareas de aquellos que no están paralizados.
El municipio penquista, pese a que conocía las peticiones de los trabajadores, optó por mantenerse al margen considerando que se trata de negociaciones entre privados.
De esta forma, el reducto deportivo de Avenida Collao suma una nueva traba de cara a la próxima Copa América a disputarse desde el 11 de junio y hasta el 4 de julio.
