El sábado en la noche, una pequeña caleta de Boca Sur vio interrumpida su tranquilidad con un trágico asesinato. La joven Katherine Dunn Ugarte, de 22 años, fue hallada con un disparo en la cabeza al interior de un auto; a su lado, su amigo Bernardo Quezada Seguel, de 25 años, también yacía muerto con dos disparos.
Desde entonces, la Policía de Investigaciones se esmera en resolver este puzzle policial, donde el primer antecedente que se maneja es que Katherine había recibido amenazas de muerte de una ex pareja hace un par de meses.
Según cuentan fuentes de Radio Bío Bío, Katherine denunció las amenazas a Carabineros, ya que se trataba de una ex pareja que la agredía mientras estuvieron en una relación. Cuando terminó con este tóxico romance, su ex reaccionó diciéndole frente a toda su familia que la mataría.
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También existe otra arista importante a investigar: el hallazgo de 4 kilos y medio de cocaína base dentro del vehículo donde fueron halladas las víctimas, como informa BioBioChile. Esta droga está avaluada en más de 50 millones de pesos, por lo que otra hipótesis que se maneja es que se trató de un crimen por narcotráfico.
Este descubrimiento desconcertó a los cercanos de estas víctimas, quienes creen que la droga fue dejada allí para despistar a la policía. Hasta el momento, no se ha podido establecer vínculos entre estos chicos y las drogas.
Desde el sábado que los investigadores intentan reconstruir los últimos minutos de vida de estos dos jóvenes, los cuales fueron hallados con disparos en la cabeza en una playa de San Pedro de la Paz, en el sector Boca Sur Viejo.
Este lunes los familiares se acercaron al Servicio Médico Legal de Concepción para retirar sus cuerpos. No dieron declaraciones.