Mauricio Pinilla y la reciente polémica que protagonizó por defender el uso de armas repercutió no solo en redes sociales, sino que también en su casa televisiva, TVN.

Así lo informaron este martes en Me Late, donde aseguraron que el exfutbolista que fue citado a una reunión para abordar los reciente hechos.

Recordemos que a través de Twitter, Pinilla criticó al gobierno de Gabriel Boric por el proyecto de ley que avanzaría hacia la prohibición de armas en nuestro país.

“Qué estupidez eso de querer eliminar las armas a los que las poseemos por deporte, legítima defensa y de manera legal. Dejamos el país en manos y armas de los delincuentes de manera ilegal #Rechazo”, escribió.

Esta publicación generó diversas reacciones, siendo criticado por políticos y también por varias figuras del medio, como Jaime Coloma y Fabrizio Copano.

Las consecuencias del polémico tuit de Pinilla

Luis Sandoval indicó que cuando se viralizaron estos dichos del conductor de Buen Finde, “lo habrían llamado para que bajara las revoluciones”.

“Le dijeron que tuviera más cuidado, porque era una figura pública, pero él habría respondido que estábamos en democracia y que cualquiera podía opinar. Pinilla mantiene sus dichos y no se retracta”, afirmó.

Andrés Caniulef, por su parte, aseguró que el exfutbolista quiso renunciar a TVN en al menos dos oportunidades durante 2021 “por desencuentros con los ejecutivos de TVN”, presuntamente porque no le estaban respetando su contrato.

Además, el periodista dejó entrever que Mauricio no se lleva muy bien con sus equipos de la señal pública.

“Con Karen Doggenweiler tiene una buena relación, pero entiendo que esto no se extiende al resto. No todos estarían tan contentos con su participación y cómo él se plantea dentro del programa”, comentó.

Respecto a esto, Sandoval puntualizó que Pinilla “se empezó a creer el cuento, se le subieron los humos a la cabeza y tuvo una especie de cambio con la gente con la que trabaja, como productores y gente de maquillaje”.

Finalmente, Francisco Halzinki acotó que el exjugador de La Roja “se lleva bien con Karen, pero con el equipo a veces es incluso déspota”, agregando que tenía “peleas repetitivas con Gissella Gallardo y cuando se enojaba se iba a encerrar a la van”.