Un inédito estudio realizó la ANJUFF junto a la Universidad de Chile para visibilizar en datos concretos la realidad del fútbol femenino en el país.

Radiografía del fútbol femenino en Chile fue ejecutado por la Asociación Nacional de Jugadoras de Fútbol Femenino (ANJUFF) y la Facultad de Economía y Negocios (FEN) de la Universidad de Chile.

Solo el 10% de las jugadoras se dedica exclusivamente al fútbol

La investigación tiene como objetivo analizar las barreras sociales, culturales e institucionales que enfrentan las jugadoras durante el desarrollo de sus carreras.

Entre los datos que destacan están los múltiples roles que deben cumplir las jugadoras para poder practicar el fútbol. Mientras que solo el 10% de ellas se dedica de manera exclusiva a este deporte, el 43,3% juega y estudia, el 27,9% juega fútbol y trabaja en otra ocupación, y el 18,5% juega fútbol, estudia y trabaja en otra ocupación.

Carla Rojas, coordinadora de Inclusión y Género Observatorio Gestión de personas de la FEN, indicó que “las jugadoras mencionan que a pesar de que son profesionales o técnicas profesionales, de todas maneras terminan optando por trabajos precarizados o informales para poder tener el espacio para jugar fútbol. Todo eso termina empobreciendo más a las mujeres”.

El estudio también resalta que si bien a las jugadoras se les exige asistir a entrenamiento, cumplir con horarios, peso y porcentaje de grasa, el 83% no recibe remuneración, el 8,5% recibe entre 100 y 499 mil pesos y el 5,6% recibe menos de 100 mil pesos.

En relación a las deportistas y sus clubes, el 4,4% tiene contrato laboral, 19% tiene un acuerdo verbal y el 61% solo está inscrita para participar del campeonato de la ANFP.

“Este estudio es tremendamente relevante y será un hito en el fútbol chileno”, explicó Tess Strellnauer, presidenta de la ANJUFF.

“Por primera vez tendremos una medición cuantitativa sobre la realidad del fútbol practicado por mujeres en el país”, agregó.

Por otro lado, más del 35% de las jugadoras indicó que le han hecho bromas de doble sentido, silbidos o dicho ‘piropos’ mientras entrenaban o jugaban el campeonato.

Más del 10% ha sido testigo de acoso sexual y el 57% de las encuestadas ha observado discriminación por género

“El porcentaje es altísimo y no puede pasar. Lamentablemente ha ocurrido siempre, por años se tapó, las víctimas se sentían desprotegidas, el victimario probablemente las amenaza. Acá tenemos que avanzar hacia un basta”, indicó Andrés Otero, subsecretario de Deportes.