La Navidad es para hacer regalos especiales y diferentes. Es por eso que una madre de Wisconsin, Estados Unidos, pensó que sería genial regalarle a su hija adoptiva (10) una fotografía de su verdadera progenitora. Sin embargo, al recibir la fotografía se llevó una gran sorpresa, pues se enteró de que la pequeña tenía una hermana gemela.
Tras saber de la sorpresiva noticia, Jennifer Doering junto a su marido se propusieron encontrar a la hermana de su retoña para que ambas se conozcan.
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El matrimonio pasó días buscando en varios sitios web de adopción, hasta que finalmente encontraron a una familia que adoptó a un bebé en el mismo orfanato. Además, las fechas de cumpleaños de ambas eran muy cercanas y compartían las mismas condiciones congénitas al corazón.

Inmediatamente se contactaron con dicha familia a través Facebook, contándoles lo sucedido y solicitando un encuentro entre las pequeñas, pero lamentablemente la junta jamás se concretó.
Sin embargo, las niñas sí lograron comunicarse a través de FaceTime, y según informa Mirror, desde ese momento que no han dejado de hablar. De hecho, la conexión ha sido tan fuerte entre ambas que están preparando, finalmente, conocerse en persona.

Cabe señalar, que de acuerdo a las familias, a parte de su gran parecido físico, las niñas comparten las mismas manías y mañas, aunque de igual forma, realizarán un examen de ADN para verificar legalmente que son hermanas.