El sacerdote se dirigía en sentido contrario, y ni el hábito lo salvó de ser reprendido por un conductor que le hizo saber su falta al volante.
El hecho tuvo cabida en una calle del barrio El Poblado en Medellín, Colombia. En ese lugar, el religioso se movilizaba por la ruta equivocada y muy apurado con el pretexto de ir atrasado a oficiar un matrimonio.
Sin entender sus razones, un conductor obstruyó el paso y le llamó la atención por su imprudencia, lo que claramente no fue tomado de buena forma por el padre.
Lee también: La despiadada venganza de una mujer contra su novio infiel
De acuerdo a lo informado por el portal de información Terra Colombia, el ofuscado cura no toleró las críticas, se bajó de su bólido y comenzó a golpear la máquina “rival”. Acto seguido, intentó abrir las puertas y comenzó a realizar ofensivos gestos contra los ocupantes del sedán.
“Por impedirle continuar en contravía este señor me agrede, golpea mi carro, intenta abrir las puertas y me insulta con gestos, mostrando un derroche de inteligencia vial y de falta de sentido común”, manifestó el agredido que recibió en varias oportunidades el clásico gesto del dedo central levantado, acota Terra.