La famosa cantante pop, Ariana Grande, estuvo a punto de morir en uno de sus conciertos en Kansas. El motivo: una de las instalaciones sobre las que cantaba no estaba en correcto estado.
El incidente ocurrió en la primera noche de su gira The Honey Moon Tour, cuando una plataforma de madera, que debía transportarla, se partió sorpresivamente a la mitad, quedando de forma vertical.
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La creadora de Bang Bang explicó en un video de YouTube lo que aconteció, revelando su gran profesionalismo, ya que al continuar con el show a pesar del incidente.
“Se supone que debía subir en el ascensor durante Love Me Harder, en una estructura de madera que se eleva, y de pronto, la estructura se hizo así”, afirmó en el video, haciendo un gesto que revela que la plataforma quedó de forma vertical.
La intérprete contó que en aquel momento pensó en que debía continuar con el espectáculo a pesar de todo: “No dejé caer el micrófono en ningún momento, me dije: ‘Ok, debo seguir cantando”.
Te dejamos el vídeo para que veas la impresión de la cantante. Aunque el clip está en inglés, el rostro de sorpresa de la artista y la tiritona grabación tras bastidores lo dice todo:
