¿Recuerdan los tiempos en que pagábamos por escribir un mensaje de texto y su valor variaba según la cantidad de caracteres? Los programas de mensajería gratuita se encargaron de dejar el SMS en el pasado y Whatsapp es quien ostenta la corona del más popular, al punto de ser comprado por Facebook el año pasado.
Cómoda, gratuita y práctica, esta aplicación debe ser una de las primeras que le instalamos a un celular nuevito. Pero utilizar esta herramienta también conlleva sus riesgos, como cuentan en el medio de prensa ABC España.
Tiene fallas de seguridad
Desde los inicios se han detectado fallas, pero con su traspaso a Facebook los problemas aumentaron. El más importante es la falta de cifrado en sus comunicaciones, que permite que terceros accedan a la agenda telefónica y mensajes escritos. La compañía corrigió este error, pero los expertos coinciden en que sigue teniendo un cifrado fácil de “romper”.
Puede revelar tu ubicación
Es una de las herramientas más prácticas cuando queremos llegar a una fiesta en una dirección muy complicada o quizá al parque donde anda paseando un amigo: basta con apretar “compartir ubicación” y tienes las coordenadas perfectas para llegar. El problema es que estos datos se descargan a través de un canal no seguro, sin utilizar SSL (protocolo seguro) y sin cifrar.
Propaga programas dañinos o “malwares”
Whatsapp no tiene ninguna clase de antivirus, así que es muy fácil que terceros puedan meterse al programa y subir archivos ejecutables que infectarían tu celular. También deja el camino libre a ataques como el pishing, técnica mediante la cual pueden apropiarse de tus claves de transferencias bancarias.
Estos pueden invadir el celular en forma de mensajes que solicitan actualizaciones o reactivar cuentas; el usuario envía su información y de esta forma se hackean sus datos.
Historiales de conversación vulnerables
Las conversaciones se guardan en una tarjeta micro SD. Por lo tanto, cualquier otra aplicación que utilice esta misma tarjeta, puede robar la información que Whatsapp guarda ahí.
Mientras Whatsapp se pone las pilas para corregir estos errores, la mejor herramienta de defensa es tener conocimiento de estas fallas. El llamado es a tener cuidado al compartir coordenadas, fotografías y datos muy delicados: en estos casos, el persona a persona funciona mucho mejor.