Primer Plano vivió uno de los capítulos más conmovedores y emocionantes de su temporada el pasado viernes tras tener de invitada a Julia Fernández, una de las protagonistas del grave accidente que dejó a Ignacio Lastra -su pareja- con el 90% de su cuerpo quemado.
Recordemos que a principios de septiembre, el modelo iba manejando por Nueva Providencia a exceso de velocidad cuando impactó con otro vehículo volcando su auto, el mismo que posteriormente se incendió.
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Tras el accidente se sabe que hubo tres personas que arriesgaron su vida para salvar la de ‘Nacho’, sin embargo, públicamente sólo se conocían a dos: Fabián Pinilla y Emanuel Soto.
No obstante, en el pasado capítulo de Primer Plano, se dio a conocer la identidad del tercer ‘ángel’ que salvó al exchico reality.
Se trata del chileno Francisco Pacheco , quien solía ser un buzo de rescate de la Armada chilena, por lo que tenía varios conocimientos que lograron ayudar a Lastra.
“Fue un momento en donde atinamos a hacer lo que había que hacer con los chiquillos, yo estaba con unos compañeros de trabajo y sentí el golpe y dije ‘algo pasó’, caminamos a la esquina de la iglesia (La Divina Providencia) y vi el auto en llamas“, comenzó su relato.
“Lo primero que hice fue correr a donde estaban los chiquillos y vi a Ignacio que venía saliendo y traté de tomarlo con los chicos, pero era imposible así que traté de tomarlo tipo llave, como dicen, para tirarlo al suelo”, continuó.
“El tema es que ahí le dije al Nacho que rodara para que el fuego se apagara, pero no pasaba nada hasta que llegó una persona con un extintor. Le dije a los chicos que me ayudaran a sacarle la ropa para que no se quemara las vías respiratorias ni nada… Alguien, no me pregunten quién, tomó un poco de tierra y le pusimos en los genitales, y en eso el auto explotó y en la (explosión) más grande, con los chiquillos lo tomamos de las manos y los pies para correrlo a la orilla”, señaló.
“La ambulancia estaba detrás de nosotros y no avanzaba por el fuego del vehículo, pero apenas se dio cuenta que Ignacio ya estaba en la vereda avanzó muy rápido y lo subió de inmediato. Ignacio sólo me decía ‘mi polola, mi polola ¿cómo está?’, y yo le contesté que estaba bien, tranquilo“, comentó.
Sin embargo, más tarde agregó que luego de que se llevaran a Ignacio a la clínica comenzó a llorar por la impotencia de no haber podido salvar a Julia, ya que no sabía que ella había salido de las primeras, pero un guardia de Providencia lo tranquilizó y le dijo que la brasileña estaba bien y que sí se había salvado.
Tras su relato, Julia Fernández se emocionó tanto que no pudo contener su llanto, además, aprovechó de agradecerle por todo lo que hizo y lo llamó su ‘ángel’.
