Un verdadero debate originó hace unos días, unas declaraciones de la actriz estadounidense Alicia Silverstone, en un programa virtual, en donde reveló que aún duerme en la misma cama con su hijo de 11 años.

Es natural. Si estuvieras en cualquier entorno salvaje y hubiera animales salvajes, al dejar a tu hijo solo, se lo comerían. Así que no es ideal que lo dejes por ahí”, explicó la norteamericana en The Ellen Fisher Podcast.

Su postura dividió a las redes: mientras algunos tildaron esta práctica de “desagradable”, otros manifestaron que cuando se es madre, siempre se quiere tener a los hijos cerca.

¿Es normal hacer esto? ¿Es perjudicial? ¿Hasta qué edad es conveniente? Todas estas interrogantes fueron aclaradas por un pediatra y un psicólogo infantil.

“Siempre les he dicho a los padres que compartir una cama con su hijo es una decisión personal, no una decisión médica“, dice a Insider Rebecca Fisk, pediatra del Hospital Lenox Hill, en Nueva York.

Eso sí, dejó en claro que jamás se debe dormir con los niños menores a un año, ya que corren riesgos de sufrir asfixia.

En tanto, la psicóloga Elizabeth Matheis indicó que “todos venimos de diferentes entornos y las reglas o pautas de crianza varían mucho. Sin embargo, expresó que esto puede ser una buena idea, cuando se está atravesando momentos de transición familiar, como un divorcio.

No obstante, Matheis afirmó que “puedes tener una relación cohesiva con tu hijo, pero al mismo tiempo establecer límites“.

Ejemplos de lo anterior sería poner un colchón en el suelo de la habitación para que el niño se acueste hasta que se duerma, y así llevarlo a su propio cuarto; o sentarse en el borde de la cama hasta que se duerma.

¿Cuándo es conveniente que padres e hijos dejen de compartir cama?

Tanto Fisk como Matheis aseguran que padres e hijos deben dejar de dormir juntos, cuando los niños comienzan su transición a la pubertad, etapa en la que comienzan a desarrollarse las características sexuales.

a que edad hijos deben dejar de dormir con los papás
CONTEXTO | Pexels

No me gustaría que un niño de 14 años durmiera en la cama con su madre o su padre. Si me pidieran que pusiera un límite, creo que es en la época prepuberal”, señaló la pediatra.

“La adolescencia, o el inicio de la pubertad, puede ser un buen momento para hacer la transición a diferentes camas”, concordó Matheis.