Las cifras son alarmantes: se detecta más de un millón de casos nuevos de cáncer de mama al año en el mundo y esta enfermedad es la segunda causa de muerte por cáncer en la mujer a nivel global.

La clave ante esta realidad es detectar este mal en forma precoz, ya sea a través del autoexamen o del control anual con el médico.

Por lo general, el cáncer no tiene síntomas, por eso es muy importante realizarse el autoexamen una vez al mes para advertir cualquier cambio o anomalía en el cuerpo, y ser rigurosas en los controles con una mamografía anual después de los 40 años o antes si existen factores de riesgo.

El ginecólogo de Clínica Indisa, Luis Cruzat, entrega las indicaciones a seguir para efectuar un autoexamen, el que no demorará más de cuatro minutos:

1. Frente a un espejo:

a. Con los brazos abajo, fijarse si alguna de las mamas está deformada, si hay cambios en el color o si el pezón está desviado o hundido.

b. Poner las manos en las caderas y presionar firmemente. Se debe inclinar hacia adelante y buscar alguno de los cambios mencionados anteriormente.

c. Con los brazos levantados y flectados hacia arriba, observar si están estas transformaciones.

d. De pie, con una mano detrás de la cabeza, revisar toda la mama con movimientos circulares desde la axila hasta el pezón.

2. Acostada:

a. Efectuar todas las maniobras anteriores, pero acostada y con una almohada en la espalda.

3. De pie:

a. Apretar el pezón y observar si hay presencia de un líquido anormal.

De esta manera, se recomienda a las mujeres que tienen el período realizar el autoexamen 7 a 10 días después de la menstruación, cuando ya haya disminuido la congestión mamaria premenstrual. Y, a las mujeres que tienen menopausia, se sugiere efectuarlo una vez al mes, y fijar una fecha para ello.

Cabe destacar que el autoexamen es un complemento del control mamario. “No reemplaza al examen clínico realizado por un médico o a la mamografía, que es el método de screening para detectar lesiones sospechosas”, agrega el doctor Cruzat.

Señales de alerta

Además del autoexamen, el oncólogo experto en cáncer de mama de Clínica Indisa, Damián Hannois, detalla los principales signos que pueden manifestarse y que se deben considerar para agendar una consulta médica como prevención. Estos pueden percibirse independiente del autoexamen:

● Bulto o nódulo duro cerca de la axila.

● Cambios en cómo se ve o se siente la mama, incluidos un engrosamiento o una pesadez notable, diferentes al tejido circundante.

● Hoyuelos, arrugas, protuberancias o crestas en la piel de la mama.

● Un cambio reciente en el pezón: se retrae (invierte) en lugar de sobresalir.

● Enrojecimiento, sensación de calor, hinchazón o dolor.

● Picazón, escamas, llagas o erupciones.

● Secreción sanguinolenta del pezón.

Consideraciones para el autoexamen

Si bien el autoexamen mamario es fácil de realizar, el doctor Hannois entrega algunas claves relevantes que hay que considerar:

● Usar las yemas de los dedos: utilizar las yemas de los tres dedos del medio, no las puntas de estos. Si le es difícil palpar con la yema de los dedos, usar otra parte de la mano que sea más sensible, como la palma o el dorso de los dedos.

● Utilizar diferentes niveles de presión. La idea es sentir diferentes profundidades de la mama, por lo que se deben utilizar distintos niveles de presión para palpar todo el tejido mamario. De esta manera, ejercer presión ligera para palpar el tejido más próximo a la piel, presión media para palpar un poco más profundo y presión firme para palpar el tejido más próximo al tórax y a las costillas.

● Tomarse el tiempo necesario para poder examinar con cuidado la mama.

● Seguir un patrón para palpar. Por ejemplo, imaginar un reloj sobre la mama o las porciones de un pastel. Empezar cerca del esternón y examinar esa sección, moviendo los dedos hacia el pezón. Luego, mover los dedos hacia la próxima zona.

Por otra parte, hay que tener en cuenta que los factores de riesgo aumentan las posibilidades de tener cáncer de mama, tales como antecedentes familiares de la enfermedad; no haber tenido hijos o si el primer parto fue después de los 35 años; no haber dado lactancia materna; estar en tratamiento hormonal de reemplazo para la menopausia; haber tenido menopausia tardía (después de los 55 años), tabaquismo y obesidad.

“La detección precoz de cáncer de mama, mediante el uso de la mamografía, ecografía mamaria y el examen clínico es fundamental, ya que cambia el pronóstico de la enfermedad, permitiendo aumentar significativamente las posibilidades de curación. Además, detectar el cáncer de mama en forma temprana facilita la realización de tratamientos oncológicos menos complejos y más efectivos para el tratamiento de esta patología”, indica el doctor Hannois.

Por último, el oncólogo experto en cáncer de mama de Clínica Indisa recalca que el “autoexamen es una herramienta complementaria al examen clínico mastológico, mediante el cual la paciente permite identificar lesiones palpables sospechosas; esto tiene gran utilidad para un monitoreo más cercano de alteraciones, especialmente para mujeres muy jóvenes, en las cuales la mamografía tiene un bajo rendimiento”.