Es seguro que nadie se atrevería a negar que beber agua es saludable, sin embargo, no todos podríamos afirmar que tomamos agua como prioridad todos los días.

¿Por qué sucede esto? A pesar de que -para muchos- está al alcance de la mano, más de una vez está la excusa de que “no tiene sabor”, “no me gusta” o incluso “me produce dolor de estómago”.

Y para que cambiemos esta mentalidad, en Página 7 conversamos con dos nutricionistas: Carola Pantoja de Clínica Biobío y Evelyn Sánchez, académica de la escuela de Nutrición y Dietética de la UDLA.

El agua es el componente más abundante en el organismo, en un adulto promedio el agua constituye entre el 60 a 65% del total corporal, convirtiéndose en un elemento indispensable para la vida“, explicó Sánchez.

De hecho, según señaló Pantoja, “todos nuestros procesos metabólicos se realizan en agua, desde permitir el balance de fluidos corporales, pasando por la absorción de nutrientes en las comidas, hasta contribuir a los desechos tóxicos del cuerpo. Entonces es fundamental su consumo de forma diaria”.

Y a pesar de que no tiene aporte calórico, el agua entrega minerales y electrolitos, necesarios para el funcionamiento de nuestro organismo.

Por ello, ambas especialistas sugieren que una buena forma de empezar el día es bebiendo agua, sobre todo porque “ayuda a los movimientos digestivos y sirve para limpiar el organismo también”.

¿Cuántos litros de agua hay que beber al día?

De acuerdo a Pantoja, en promedio, se debieran consumir de dos a tres litros de agua diario: “La idea es ir hidratándose durante el día, es decir, ir fraccionando su consumo, no todo de una sola vez, pues hay gente que tiende a pensar que mientras más agua consumo más calorías quemaré o perderé peso, y eso no es cierto”.

Por su parte, Sánchez precisó que se “recomiendan de 6 a 8 vasos de agua diarios” para los adultos, teniendo el promedio de 30 a 35 ml. de agua por kilo de peso. En el caso de los niños y adultos mayores, quienes “constituyen la población más susceptible de presentar deshidratación”, aconseja 65 ml por kilo de peso.

Experto explica si es peligroso beber del vaso de agua que dejaste en el velador
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Beber agua más de la cantidad necesaria no es recomendable, ya que su “consumo excesivo puede causar efectos no deseados e incluso perjudiciales para la salud“. Algunos de estos efectos, según señaló la revista Clara, puede ser sequedad de la piel y de las mucosas.

Por ello, Sánchez indicó que para “velar por cubrir el requerimiento hídrico (…) se recomienda cuantificarla en el día porcionándola en botellas aptas, por ejemplo”.

Consejos para una hidratación apropiada

Por supuesto que el líquido más apropiado para la hidratación es el agua natural, pues “es sin contenido de azúcar, ni aporte calórico, solo nos aporta hidratación“, dijo Pantoja.

Sin embargo, existen otras formas de beber agua sin hacerlo directamente. Por ejemplo, algo que podría ayudar mucho a las personas que tiene problemas con su consumo, es ingerir aguas de hierbas, jugos de frutas o caldos.

Las frutas y verduras son el grupo de alimentos que más líquido contienen, cercano a un 85% de agua. Referente a preparaciones elaboradas, los caldos o sopas contienen el segundo nivel más alto de agua, con valores que oscilan entre un 82 y un 95% de agua, según la receta y preparación”, explicó Sánchez.

“Para favorecer la ingesta, el agua puede ser saborizada de manera natural con hierbas aromáticas como la menta o con verduras o frutas como pepino”, añadió.

Otro consejo para habituarse a beber agua, es llevar “una botella a todos lados“, dijo Pantoja, “con la idea de obligarse un poquito a esta rutina”.

Otro método, es colocar alarmas en el celular que nos recuerden que debemos tomarnos un vasito de agua. De hecho, existen varias aplicaciones para nuestros dispositivos que cumplen este fin, como Aqualert.

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¿Es hambre o sed?

Debido a los estímulos internos y externos que recibimos a diarios, es más común de lo que parece no saber diferenciar el hambre de la sed.

“El hambre es un proceso paulatino, no asociado a algún alimento en especial originado principalmente en el estómago. La sed en cambio se acompaña de sequedad de la boca, dolor de cabeza y pérdida de la turgencia de la piel (síntomas de deshidratación). Si se tienen dudas, es aconsejable beber agua y esperar 5 a 10 minutos, ya que en este lapso de tiempo las señales deberían desaparecer si es que el origen es necesidad de hidratación“, sugirió Sánchez.