Más de 25 días de tensión son los que se han vivido producto del estallido social chileno, las manifestaciones y, en paralelo, las situaciones de violencia que afectan tanto a la propiedad pública como privada.

Este escenario tiene a varias personas con niveles altísimos de estrés, ansiedad y angustia, lo que puede traducirse en una disminución del apetito o, por el contrario, aumentar las ganas de comer, por lo que es necesario poner atención en el autocuidado en esta materia.

Y es que si bien el alto consumo de medicamentos y la salud mental en nuestro país han estado en la mira de los especialistas en el último tiempo, la contingencia podría generar un aumento en estas áreas; una consecuencia que se ha visto de manifiesto en el relato de muchos ciudadanos y cuyos efectos pueden ser a largo plazo.

De esta manera, el autocuidado es parte relevante para poder enfrentar los efectos emocionales que puedan existir: darse tiempo para distraerse y realizar actividades con los cercanos y cuidar nuestra alimentación, son decisiones trascendentales en estos días para nuestra salud.

En esta línea, la nutricionista de Clínica Terré, Daniela Gómez, detalló la importancia de tener precaución en lo que ingerimos en periodos como los que estamos viviendo. “La tensión nos lleva a cambios físicos y fisiológicos afectando nuestra salud, aumenta la segregación de hormonas de estrés que provocan mayor probabilidad de enfermedades metabólicas y mentales, lo que aumenta también la probabilidad de comer alimentos poco saludables y de forma compulsiva”, explicó.

Como señalamos anteriormente, esta situación provoca patrones alimentarios poco saludables como una alta ingesta calórica, largos tiempos de ayuno, ingestas compulsivas con alto consumo de grasas saturadas, sodio y azúcares simples.

Adicionalmente, existen alimentos que pueden aumentar la sensación de ansiedad y estrés corporal como el alcohol en grandes cantidades, el café y bebidas energéticas por su contenido de cafeína.

En este sentido, el preferir alimentos saludables nos puede ayudar a aliviar la tensión, estabilizar el azúcar en la sangre e ir eliminando el estrés, por lo que la especialista entregó una serie de recomendaciones:

1.- Horarios: no saltar comidas para evitar ingestas compulsivas, siempre andar con una colación, puede ser una fruta, lácteo descremado o frutos secos.

2.- Elige alimentos antioxidantes

a) Vitamina C: naranja, kiwi, pimentón, arándanos, maqui, etc.

b) Vitamina E y omega 3: palta, frutos secos, salmón, aceite de oliva.

c) Magnesio: vegetales de hoja verde oscura como la espinaca, palta, frutos secos, semillas de calabaza: nutriente esencial para producir energía y regular el funcionamiento del sistema nervioso y prevenir el estrés.

3.- Flora intestinal: ayuda a regular el estrés. Consumir chucrut, pepinillos, kombucha, kéfir, etc.

4.- Infusiones: las propiedades relajantes de la manzanilla, la melisa y la valeriana son ideales para controlar la ansiedad y el insomnio.

5.- Agua: beber como mínimo dos litros de líquido al día.

6.- Ejercicio: ayuda a liberar endorfinas y nos da esa cuota de felicidad que requerimos.