El aceite de coco es un producto natural que puede ser usado tanto en la alimentación, como externamente para el cuidado de la piel y el cabello.

Del coco se aprovecha prácticamente todo, el agua en su interior, la flor y la pulpa. Es muy nutritivo y ofrece muchas ventajas curativas y cualidades beneficiosas para la salud.

Este aceite vegetal también es conocido también como manteca de coco. Se trata de una sustancia grasa que contiene cerca del 90% de ácidos saturados extraídos mediante prensado de la pulpa o la carne del coco.

Según la especialista en temas saludables, Sandra Vera, los ácidos grasos de cadena media (MCFA) abundantes en los cocos se digieren más fácilmente, y son utilizados de manera diferente por el cuerpo en comparación a otras grasas, puesto que se envían directamente al hígado y se convierten inmediatamente en energía, es decir, el cuerpo no la almacena.

Gracias a esta rápida y fácil absorción,se aligera la carga de trabajo del páncreas, el hígado y el sistema digestivo, por lo que el aceite de coco “acelera” nuestro sistema metabólico.

Este producto también ácido láurico, una grasa muy poco común que en el cuerpo se convierte en monolaurina, que tiene propiedades antivirales, antibacterianas y antiprotozoarios. También, otro ácido graso que se encuentra este aceite es el ácido cáprico, que tiene actividad antimicrobiana.

Pexels (CC)
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Además, este producto se usa mucho en la cosmética natural, en parte debido a su alto contenido de vitamina E y K, que lo convierten en un potente aliado cuando se trata de mejorar el estado de nuestra piel y pelo.

Dadas estas características, y que además el aceite de coco está lleno de ácidos grasos ideales para la hidratación, se convierte en un gran remedio natural cuando se trata de combatir la resequedad en nuestro cuerpo.

Un buen aceite de coco debe ser obtenido por presión en frío, es decir, que sea de pulpa pura prensada hasta obtener aceite, también debe ser extra virgen, no refinado y no hidrogenado, e idealmente que cuente con certificación orgánica.

Resiste mucho mejor que otros aceites los cambios de temperatura, sin oxidarse ni volverse tóxico y sin degradar sus propiedades al pasar de un estado a otro al cocinar. A la hora de freír dura mas que otros aceites vegetales.

Generalmente se encuentra en estado sólido y de color blanco, comienza a derretirse sobre 25ºC y su punto de humo es de 187ºC, muy alto, por ello es difícil que se queme o se oxide.

Beneficios

1. Fortalece el sistema inmunológico
2. Estimula el metabolismo, mejora la función de la tiroides, y aumenta los niveles de energía
3. Ayuda a absorber el calcio y el magnesio
4. Es antioxidante, antibacterial y anti-hongos
5. Aporta menos calorías que el aceite convencional
6. Ideal para diabéticos
7. Ideal para regular el nivel de colesterol, ya que ayuda a reducir los triglicéridos, el colesterol total y el colesterol LDL.
8. Excelente humectante, ya que mejora la hidratación de la piel y aumenta el contenido de lípidos de esta.
9. Gracias a sus propiedades antimicrobianas ayuda a combatir las bacterias de la boca, reduciendo el mal aliento.

Cabe mencionar que el próximo 10 de noviembre se llevará a cabo “1º Encuentro Conexión Mente y Cuerpo” en Concepción, evento organizado por Sandra Vera en el que participará Sergi Recasens, el famoso experto en nutrición, quien hablará de las emociones y su impacto en la salud.