Una indignante denuncia de una madre ha dado la vuelta al mundo, y hoy tiene a una reconocida cadena de restaurantes estadounidense pidiendo disculpas.
De acuerdo a Alexis Bancroft, junto a su familia decidieron ir al restaurante IHOP de Arkansas (Estados Unidos) a desayunar, sin embargo, cuando se encontraban comiendo, un funcionario del local les arruinó el día.
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El trabajador les llamó la atención a los papás por dejar que su pequeño hijo Will (3), quien nació sin brazos, comiera desayuno con sus pies encima de la mesa, manipulando así los implementos con sus extremidades inferiores.
La madre aseguró al canal NBC que tras este acto, el cual catalogó como discriminatorio, le preguntó al trabajador si este le preguntaba a todos sus clientes si se lavaban las manos antes de comer, puesto que ella le había lavado los pies a su hijo antes de sentarlo en la mesa.
Tras este desagradable encuentro, Alexis indicó que se marchó indignada y este mal rato le trajo consecuencias. “Al día siguiente no se quería sentar en la mesa para comer, quería sentarse en la chica, algo que el realmente no puede hacer”, comentó Bancroft, según consignó el portal NYDailyNews.
Debido al revuelo que causó este caso, IHOP decidió referirse al tema en un comunicado, en el cual el presidente de la cadena, Darren Rebelez, ofreció sus disculpas a la familia y aseguró que ya se puso en contacto con ella, según consignó el medio internacional Huffington Post.
Además, la empresa indicó que ofrecerá una mejor formación a sus equipos de trabajo para asegurar el nivel de servicio de IHOP, sobre todo respecto al servicio con personas con discapacidades.
