En internet se pueden encontrar todo tipo de servicios, unos baratos y otros excesivamente caros. Sin embargo, hay algunos trabajos que requieren de una alta prolijidad y conocimiento, por lo que pagar poco puede significar un completo desastre.
Uno de estos servicios es el de retoque de fotografías, el que se puede encontrar en sitios web como Fiverr, donde las personas pueden cotizar un trabajo por diferentes precios.
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Según consignó BiobioChile, una fotógrafa y youtuber candiense, Irene Rudnyk, decidió realizar un experimento para demostrar que lo barato puede salir caro.
Tal como comentó en un video, Irene eligió tres servicios de edición fotográfica ofrecidos por freelancers en Fiverr, cuyos resultados fueron muy dispares.
A los ‘profesionales’ les pagó 7 mil pesos, a otro 3 mil pesos y al último la módica suma de 100 pesos, en el requerimiento detalló: “Me gustaría que esta imagen fuera vibrante y cálida. Piel limpia, ojos brillantes y su pelo más rojizo, para que haga juego con el fondo. También, confío en su juicio para que esta imagen parezca bonita”.
Fotografía original:
En el primer caso -y que fue por el que más pagó- recibió un trabajo muy poco natural:
El segundo trabajo estaba muy “pulcro” y los colores lucían muy sintéticos.
El tercero es realmente el más horrendo y barato, ya que aparece con el pelo de un color rojo fuerte, sus labios la misma situación, y su cara inclusive un poco más ancha de lo normal.
Como conclusión, Irene editó por última vez la imagen para demostrar que el trabajo debe hacerse por un profesional con conocimientos en el área y que el costo – por supuesto- supera los 7 mil pesos…
