Hace una semanas, Samsung lanzó dos de los nuevos miembros de la familia Galaxy A: el Galaxy A54 5G y el Galaxy A34 5.
Los móviles son parte de los dispositivos Premium de Samsung, pero que están a precios accesibles.
En Página 7 tuvimos la oportunidad de probar el Galaxy A54 5G, y esto es parte de esa experiencia.
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Lo primero que llama la atención, y que ya es una constante en los nuevos celulares, es que dentro del empaque no viene cargador, solo el cable. Por lo mismo, hay que contemplar usar uno que esté a nuestra disposición o comprar uno nuevo.
Ahora ya viendo el telefóno, se aprecia un diseño elegante y con un cuerpo plástico que hace notar mayor resistencia.
Si hablamos de resistencia, es bueno mencionar que el Galaxy A54 5G viene con protección contra polvo y agua, lo que desde el inicio ya empieza a sumarle a puntos.
Al empezar ocuparlo, hay que ser justos, por mucho que esté considerado como ‘gama media’ al ser más accesible que la línea S, tiene las características de uno de ‘gama alta’.
Los primeros detalles que se pueden notar es la alta calidad de la pantalla, muy alto contraste y una respuesta rápida al toque de los dedos.
Viene con Vision Booster mejorado y una frecuencia de actualización de 120 Hz, la pantalla seguirán el ritmo de los usuarios cuando se muevan entre diferentes condiciones de iluminación
Esto también aplica para el sonido, con altavoces estéreo y buena potencia al tener el máximo de volumen.
No olvidar: el A54 5G no tiene salida de audio analógico, por lo que necesitan auriculares Bluetooth como los Galaxy Buds
Y siguiendo con la pantalla, funciona bien y de manera ágil la seguridad biométrica, por lo que no hay mayores problemas para acceder a la pantalla del móvil.
Por otro lado, se hace inevitable revisar las redes sociales clásicas, TikTok, Instagram, donde se pueden apreciar los movimientos finos a la hora de hacer scroll. Lo mismo aplica al ver videos en YouTube, alta calidad desde el primer minuto.
Ya al probar algunas aplicaciones más potentes, como jugar Fortnite y FIFA23, se ve en algún punto algo de ralentización, pero nada que impida continuar con las funciones de estas Apps.
Ahora bien, aquí es donde aparecen los primeros comentarios más disidentes: la batería.
Al pasar las horas, vemos un consumo totalmente esperado de la batería, esto si mencionamos jugar y revisar por largo rato las redes sociales.
Con un carga del 100% podemos estar sin problemas durante una jornada completa, pero aumentamos el uso del móvil, puede que en algún momento del día necesitemos un poco de carga.
Ahí es importante utilizar las herramientas del móvil para controlar el consumo de las apps en segundo plano, y así poder sacar el máximo de provecho de la batería.
Haciendo distintas pruebas, en varios días: con cerca de una hora y media de carga, tendremos un carga completa
Cabe mencionar, que esta línea de la familia A de Samsung cuenta con una actualización del sistema operativo por 4 años, mientras que las actualizaciones de seguridad se realizarán por 5 años.
¿Y cómo funciona la cámara del Samsung A54 5G?
El A54 cuenta con tres cámaras principales: una principal de 50 megapixeles, una secundaria ultra gran angular de 12 megapíxeles y una macro de 5 megapixeles, que sin duda es la más débil, en temas prácticos, de las tres. La frontal es de 32 MP.
Sin duda la cámara principal es que la se roba todas las miradas sobre todo por las útiles herramientas para las fotografías de noche.
¿Qué dicen los precios?
El Galaxy A54 5g de 128 GB tiene un precio referencial de $439.990 y el de 256 GB de memoria a $499.990, ambos disponibles en los colores Awesome Lime (limón), Awesome Graphite (grafito) y Awesome White (blanco).
Conclusiones: el Samsung Galaxy A54 5G cumple con lo prometido en este nuevo paso de la familia A, sobre todo con una pantalla que entrega una grata experiencia de usuario.
Las herramientas permiten sacar buenas fotografías y videos, y poder jugar con una resolución digna de la línea S.
Por lo mismo, Samsung suma puntos con este móvil de ‘gama media’ que se encumbra a ser uno de ‘gama alta’.
