“La hermana fantasma”. Así llaman los medios a Laura Lopes, la hermanastra desconocida de los príncipes William y Harry. Aunque la Realeza Británica suele ser el centro de atención en la agenda mediática en Reino Unido, existe un motivo por el que no se habla de ella.

Laura tiene 44 años, no es hija del Rey Carlos III y tampoco de la fallecida Lady Di. Ella nació fruto de la relación entre Camilla Parker Bowles, actual reina consorte, y el brigadier Andrew Parker Bowles, y es hermana biológica de Tom Parker Bowles, un famoso escritor y crítico gastronómico británico.

Tanto su hermano como ella se han mantenido siempre alejados del foco mediático y su relación con William y Harry no ha sido la mejor desde el inicio, debido a la turbulenta historia entre su madre, Carlos y la princesa Diana.

Sin embargo, con el tiempo fue cambiando y una prueba de ello fue su presencia en la boda de William y Kate de Gales.

Carlos, Diana y Camila

La historia del matrimonio de Diana y Carlos es conocida para el público en general. Se casaron en 1981, tuvieron hijos y se divorciaron en 1996, en medio de un escándalo de infidelidad.

La realidad es que la pareja se enfrió rápidamente porque el amor de Carlos pertenecía a Camilla, con quien siempre se mantuvo en contacto.

Camilla es su madre
El rey Carlos III y la reina consorte Camilla en Highgrove

En una entrevista con la BBC, la propia Lady Di manifestó: “Éramos tres en este matrimonio, así que estuvo un poco ocupado”. Carlos y Camilla habían estado juntos y luego se separaron. Más allá de los nuevos vínculos sentimentales que desarrollaron, seguían visitándose.

Diana Spencer finalmente falleció en un accidente automovilístico el 31 de agosto de 1997, donde también perdieron la vida su pareja Dodi Al-Fayed y el conductor del coche, Henri Paul. La muerte de la ex princesa golpeó a la familia real y a la opinión pública como una bomba.

Años después, Laura y Tom se convirtieron oficialmente en hermanastros de Harry y William cuando sus padres contrajeron matrimonio en 2005.

Los hijos de Camilla

Tom nunca ha tenido problemas de recibir los flashes de la atención mediática. Es autor de 7 libros de cocina y en 2010 ganó el premio Guild of Food Writers por sus escritos sobre comida británica. Ha publicado reseñas en revistas como GQ y Esquire, y ha visitado famosos programas de televisión como Masterchef y ha ayudado al chef Gordon Ramsay en The F-word.

Laura, por su parte, prefiere permanecer en un segundo plano. A pesar de asistir ocasionalmente a eventos importantes como bodas, a veces se aseguraba de estar de incógnito. Esto tiene su origen en sus experiencias con la prensa durante su infancia.

A pesar de que Carlos estaba casado con Diana cuando Laura y Tom aún eran niños, circularon las versiones sobre la relación con su madre. Esto despertó el interés de la prensa amarillista en ellos. Laura tuvo dificultades para manejarlo y optó por alejarse de su familia para que le prestaran menos atención.

Estudió Historia del Arte y Marketing en la Universidad de Oxford Brookes. En 2001, Lopes estuvo trabajando tres meses en la Peggy Guggenheim Collection en Venecia y gestionó The Space Gallery en Belgravia. Más tarde, en octubre de 2005, fundó la Eleven Gallery en Londres.​

Ya no es Parker Bowles, sino una Lopes

Lopes es el apellido que Laura adquirió cuando se casó con su marido en 2006 que, casualmente, también se llama Harry y es ejecutivo de una corporación de energía renovable.

Harry Lopes es nieto del aristócrata Massey Lopes y Helen Dawson, como también de Gavin Astor e Irene Haig de la Casa Astor. La boda se celebró en una iglesia de Wiltshire y llevó un vestido de Anna Valentine, la misma que diseño el vestido de boda de su madre.

Juntos son padres de tres niños. Laura suele estar presente en algunos eventos junto a su madre y ahora mantiene una buena relación con la familia real. Una prueba de esto es que su primogénita, Eliza, se convirtió en una de las damas de honor en el casamiento de William y Kate Middleton.