James MacDougall tiene 37 años y ya engendró 15 hijos a través de donaciones privadas de esperma, las cuales anunció a través de las redes sociales.

Ahora se encuentra en el ojo del huracán, por presuntamente no informar a las madres de sus hijos que presentaba una enfermedad genética: el Síndrome X Frágil.

Esta es una afección hereditaria que conduce a un coeficiente intelectual bajo y un retraso en el desarrollo incurable, de acuerdo a Medline Plus.

La identidad de MacDougall salió a la luz en una batalla judicial de la familia en Derby, Reino Unido, después de que solicitó órdenes de responsabilidad parental, pese a que originalmente firmó un acuerdo, estableciendo que no quería tener contacto con sus hijos.

Tras conocer sus antecedentes, la jueza Justice Lieven de la corte de Derby, evitó que otras mujeres lo usen como donante de esperma y dictaminó que no debería tener ninguna responsabilidad sobre los niños, ya que les causaría daño.

MacDougall se defendió: “No he hecho nada malo. Hice algo bueno al ayudar a estas mujeres, les di hijos, pero la gente dice que no fui honesto. La verdad completa saldrá a la luz. Estoy muy enojado y molesto”, manifestó a Daily Mail.

Madre de James MacDougall lo defendió

Quien también habló en extenso con el medio británico fue su madre June MacDougall, quien calificó a su hijo como “bondadoso, pero crédulo”.

“Él quería ser parte de sus vidas, quería ver a sus hijos. Él solo quería ayudar a esas personas, ayudar a esas mujeres, en una relación gay, a cumplir sus sueños y convertirse en madres. No buscó ningún dinero, hasta donde sabemos por brindar ese servicio. Simplemente lo hizo”, señaló.

De todas formas, la madre del acusado indicó que “él les habría dicho a esas madres sobre la condición, estamos convencidos de que lo haría para ayudar a proteger a los niños”.

Este caso judicial ha roto su corazón y el nuestro. Cuando me dijo por primera vez que se había convertido en padre hace dos o tres años (…) me sorprendió, porque ni siquiera sabíamos que tenía novia y luego me dijo que era un donante de esperma”, añadió.

Cabe señalar que los médicos han mostrado preocupación por el desarrollo de uno de los niños, que todavía no habla a los 3 años y tiene un “comportamiento desafiante”.

De acuerdo a la jueza, MacDougall mostró una “irresponsabilidad fundamental” al no ser sincero sobre su condición, lo que le impedía ser donante de esperma a través de una clínica regulada.