Una escena digna de una película fue la que protagonizó un joven de 16 años llamado Cyrus, quien logró socorrer a su madre en un peligroso momento, aplicando un procedimiento médico que aprendió viendo la popular serie Grey’s Anatomy.
Todo ocurrió en Maine, Estados Unidos, donde Kristen Larrobino sufrió una violenta caída al resbalar con hielo. La taza de café que sostenía en su mano se rompió, cortándole la muñeza en medio del incidente.
“Cuando miré mi mano, inmediatamente le dije a mi hijo que llamara al 911“, confesó la mujer a la cadena CNN, detallando que descartó inmediatamente la posibilidad de conducir hasta el hospital.
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Cyrus llamó a emergencias y trató de ayudar revisando la herida, a la que aplicaron presión con una polera mientras respondían las preguntas del despachador.
Cuando les indicó que debían buscar algo para formar un torniquete improvisado, usaron una cuerda del cajón de basura, pero esta se rompió. Fue entonces que el adolescente pensó en arrancarle los cordones a sus zapatillas nuevas.
“No me tomó un segundo desatarlos ni nada”, reconoció, añadiendo que al costado de su casa encontróp un trozo de madera y comenzó a hacer el torniquete con ella. Ató un nudo con los cordones en el brazo de su mamá, colocó el palo en el nudo y empezó a torcer, tal como vio en la serie médica de ABC.
Un acierto
“Fue una de las cosas más dolorosas que he sentido en mi vida, y eso que me he roto huesos y tuve hijos”, señaló Kristen en la entrevista posterior.
Poco después llegó la ambulancia para hacerse cargo, y trasladaron a la víctima al hospital Eastern Maine Medical Center. En total, la madre de Cyrus tuvo el torniquete unos 40 minutos, entre el que se hizo en casa y el que ajustaron en el recinto médico.
Como hubo daño en las arterias de su muñeca y brazo, necesitó dos cirugías que duraron cerca de siete horas. “El cirujano dijo que estuve a 6,3 milímetros de cortar toda mi muñeca”, explicó ella.
Kristen -quien tendrá que someterse ahora a una larga terapia de recuperación– explicó lo agradecida que está con el servicio de emergencia y el personal del hospital, pero especialmente con su retoño por estar allí y actuar rápidamente.
“Fue una de esas cosas en las que ves el procedimiento en la televisión y dices ‘oh, sí, lo que sea’, pero luego lo ves en la vida real o te sucede a ti, y es algo completamente diferente”, concluyó la accidentada.
