Comienzan a bajar las temperaturas, sobre todo en la noche, y regresa una práctica que para muchos es habitual: dormir con calcetines. Y si bien es algo que puede parecer poco sexy, utilizar esta prenda aparentemente ayuda a conciliar el sueño.
Según consignó el diario Las Últimas Noticias, en 2018 se publicó un estudio surcoreano titulado “Efectos sobre la calidad del sueño del uso de calcetines en la cama y las respuestas termorreguladoras en ambientes frescos”. El él, monitorearon con sensores la calidad del sueño de 6 varones.
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Al acostarse con calcetas, demoraban 7,5 minutos promedio en quedarse dormidos. Sin ellas, en tanto, podían tardar hasta 15 minutos, y despertaban durante la noche.
Promotores del buen sueño
La neuróloga María Fernández Gómez, del Centro del Sueño Red Salud UC Christus, señala que el ciclo circadiano es nuestro reloj biológico, y el sueño es precisamente uno de los ritmos que regula.
“Nuestra temperatura corporal central también tiene un ritmo que durante el día va aumentando hasta llegar a su peak entre 4 y 8 de la tarde”, advierte la experta. Luego de eso, desciende y llega incluso a la mínima temperatura corporal durante la madrugada, lo que se relaciona con el REM, una etapa del sueño más reparador.
“Lo que el estudio postula es que el uso de calcetines haría que se maneje mejor la temperatura corporal central, y eso promueve el buen sueño“, explica.
“Es algo personal”
Álvaro Vidal es neurólogo de la Clínima Somno. En conversación con LUN dijo que es imposible asegurar de manera tajante si es bueno o no dormir con calcetines.
“No hay respuesta correcta. Va a depender de la temperatura que le guste a la persona, las etapas de la vida, la estación del año. Es algo personal“, señala.
Su colega María Fernández concuerda con eso, pues dice que esta práctica podría resultar incómoda para quienes sufren de algún trastorno, como el síndrome de piernas inquietas.
“Es una incomodidad que se presenta en reposo, generalmente antes de dormir, y que se alivia parcial o completamente al mover las piernas”, concluye.
