El mal aliento de los gatos se debe principalmente a problemas dentales, como la gingivitis, una inflamación que si no se controla a tiempo puede derivar a periodontitis, una enfermedad irreversible. Así como sucede con nosotros los humanos.

Y para saber más sobre la halitosis felina y su tratamiento, Página 7 conversó con Andrea Poblete, vocera del  Colegio Médico Veterinario (Colmevet) y experta en odontología.

“Lamentablemente, los gatos tienden a tener problemas dentales en un porcentaje importante. Desde gatitos que pueden tener problemas en la encía, donde van acumulando placa bacteriana y se genera una gingivitis“, explicó Poblete.

Esta enfermedad está asociada al recambio de dientes -que termina a los seis meses de edad aproximadamente- y que “no duele, no molesta, pero sí causa mal aliento y hace que la encía sangre más fácil“, señaló la especialista.

Si no se le ponen “atajos” a la gingivitis, en el tiempo terminará convirtiéndose en una periodontitis, una enfermedad crónica que deriva en la “pérdida del hueso que rodea al diente“, cuyo avance, detalló la veterinaria, se transformará en un foco de infección que afectará a otros órganos (como el hígado, los riñones y el corazón) y se irán soltando los dientes.

El color de la encía del gato: “Es rosado coral pálido”, precisó Poblete y añadió: “Cuando hay gingivitis en la parte más cercana al diente hay una línea roja, puede que pase en toda la encía como puede que pase en un solo diente”.

En tanto, otras lesiones dentales, también pueden provocar el mal aliento en los gatos, como lo son las lesiones resortivas, que carcome los dientes, y la estomatitis caudal, una patología que provoca mucha salivación y mal aliento. De hecho, con esta última enfermedad los felinos pueden dejar de lavarse y de comer.

Los gatos esconden muy bien el dolor. Cuando muestran dolor es porque de verdad les duele demasiado y porque lo han pasado mal durante mucho tiempo“, señaló Poblete.

Las causas que no tienen que ver con los dientes

Si bien es más probable que la halitosis la provoque una causa dental, pueden haber otros patologías que no tiene nada que ver con la boca gatuna, como lo son las enfermedades renales y la diabetes.

  1. Las enfermedades renales: por lo general, los gatos pasados los siete años tienen más probabilidades de tener una enfermedad renal, lo que provocaría un “aliento urémico”. “Es como si tuvieran olor a pie en la boca”, describió la especialista.
  2. La diabetes: esta enfermedad genera un “aliento ácido, como a manzana o acetona”, indicó Poblete.
Mitos sobre los gatos
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Recomendaciones: el cepillado es esencial

De acuerdo a la especialista de Colmevet, si un dueño cree que su gato tiene mal aliento, es necesario saber qué lo origina consultando a un especialista.

Es importante consultar para ver que todo esté bien. Incluso puede haber traumatismo, porque los gatitos se pueden enganchar los dientes con una toalla, con un juguete, o pelearse con algún gato, o tener alguna caída, donde se hayan fracturado un diente”, comentó.

Sin embargo, es clave que el dueño sepa cómo actúa su gato. “Si yo le conozco la boca a mi gato voy a poder darme cuenta a tiempo (…) hay que chequear si el gato está comiendo bien o está tirando la comida por todos lados. Ver si quizás prefiera comida blanda, o si los juguetes están con sangre, o cualquier signo que a uno le parezca extraño”, explicó Poblete.

Como medida de prevención, aconseja el cepillado diario. “Hay gatitos que se dejan, hay gatitos que no, pero hay que intentarlo, sobre todo cuando tenemos un gato domesticado que anda todo el día en la casa, que no come pajaritos ni lagartijas, que en el fondo eso es parte de la tenencia responsable”, aseguró.

¿Cómo realizar un cepillado en gatos? Debes tener en cuenta que se necesita un cepillo ultra suave y de tamaño pequeño -no para bebé, pero puede servir uno para niños chicos, dice Poblete- que tenga todos los filamentos del mismo tamaño (como el de la foto a continuación). 

Cepillo de dientes
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Y si quieres aventurarte en esta tarea, y ayudar a tu mascota a que tenga una mejor higiene dental, puedes seguir estos dos pasos que nos indicó la especialista.

Esto puede ser con un gato pequeño, uno adulto o súper viejo, da lo mismo, todos se pueden acostumbrar, lo que pasa que uno como dueño tiene que tener la constancia de hacer esto todos los días“, explicó Poblete.

  1. Presentar el cepillo: no es llegar y meterlo a la boca, debes acostumbrarlo de a poco. Mostrárselo, que lo huela y pasárselo por el exterior: por sus mejillas, nariz y barbilla, y en el proceso felicitarlo. “‘¡Ay, muy bien!’, ‘¡Qué bonito este gatito!’, y hacerle todas las fiestas posibles, habidas y por haber”, dijo Poblete, así asociará al cepillo con algo positivo.
  2. Cepillado: Cuando ya notes que se acostumbró al “cepillado exterior”, puedes comenzar levantando “el labio un poquito y pasando el cepillo cerca, pero no en los dientes. Después, cuando tienes la confianza de manipularle la boca, ahí empiezas a cepillar por dentro”, advierte la veterinaria.

“Es muy bueno cepillar porque todas las enfermedades dentales tienden a empezar con sangramiento de encías, antes incluso del mal olor. Entonces, si hay sangramiento de encías al tocar suavecito con el cepillo, no al romperlo es que algo está pasando”, finalizó la especialista.