El fin justifica los medios, decía Nicolás Maquiavelo. Y al parecer Yoshito Harada, se tomó muy a pecho la célebre frase del filósofo y escritor italiano, en un caso que llamó la atención en la localidad de Aichi, en Japón.

El hombre de 32 años saltó a la palestra en aquel país, luego que una mujer, al salir del estacionamiento de un supermercado, se percatara que tenía una de las ruedas pinchadas de su auto.

Al bajarse a revisar el neumático, un hombre se ofreció ayudarla, actitud que la afectada encontró sospechosa, ya que había tenido una experiencia similar durante el año pasado.

Por lo mismo es que decidió dar aviso a la policía, momento en que todos se llevaron una sorpresa: el sujeto que pinchó la rueda de la mujer era Harada, el mismo que se había ofrecido ayudar, consigna el medio Japan Today.

¿Por qué lo hizo? Según comentó a las autoridades, Yoshito realizó esta acción para poder conocer a la mujer, un modus operandi que no era nuevo para él y que le trajo más dolores d cabeza en los últimos días.

Antiguos delitos

Cuando el caso comenzó a tomar fuerza en redes sociales y medios locales, fueron varias otras mujeres que se sumaron a la denuncia, recordando episodios similares vividos durante 2013. Unas pocas investigaciones confirmaron lo que muchos ya pensaban: se trataba del mismo individuo.

Fue su propio abogado el que admitió que su defendido ejerció esta práctica unas mil veces, pero en aquella oportunidad logró zafar de la cárcel, indemnizando a las víctimas con un monto cercano a los 220 mil pesos chilenos.

Adicionalmente, se le colocó un GPS para no perderle el rastro, pero Harada siguió llevando a cabo su insólita forma de conquista, siendo arrestado nuevamente en 2016.

Cabe señalar que a pesar de los numerosos intentos de conquista -y de neumáticos pinchados- el hombre aún no encuentra pareja.