Un increíble y casual hallazgo de más de 100 restos de niños, algunos con monedas en sus bocas, fueron encontrados en el sudeste de Polonia, mientras trabajaban en la construcción de una ruta.

Según información del medio polaco The First News, el descubrimiento confirmaría la leyenda local que en ese lugar había un cementerio infantil.

En la ruta de la localidad de Jezowe, en la provincia polaca de Subcarpacia, la Dirección General de Carreteras y Autopistas Nacionales del país anunció el hallazgo en un comunicado: “Según las observaciones arqueológicas hasta la fecha, podemos concluir que alrededor de 70% u 80% de las personas enterradas ahí son niños“.

El descubrimiento de un total de 115 cuerpos enterrados, fue analizado por arqueólogos, quienes tras analizar las monedas en sus bocas, indicaron que los restos datan del siglo XVI y XVII.

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Las monedas representar un signo de sus creencias. Se llaman óbolos de los muertos o óbolos de Caronte. Es una antigua tradición precristiana, pero que se siguió cultivando por muchos siglos más, incluso hasta el siglo XIX”, explicó la arqueóloga Katarzyna Oleszek.

¿Para que se utilizaban? La creencia que se remonta a la antigua Roma, indica que era un tributo para Caronte, el barquero que transportaba las almas al otro lado del río que separaba el mundo de los vivos y los muertos.

Monedas
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Se trataba de un cementerio católico

Durante mucho tiempo en la zona, conocida también como “Las Montañas de la Iglesia”, los habitantes especulaban sobre un cementerio de niños en el lugar.

Los arqueólogos suponen que, como en las tumbas no habían clavos o asas de ataúdes, se trataba de una comunidad muy pobre amparada por la iglesia católica.

Hallan antiguo cementerio católico en Polonia
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La disposición de los esqueletos, el estado de su preservación, muestra que el descubrimiento se corresponde con un cementerio de la iglesia católica, que ciertamente fue bien atendido (…) Los habitantes sabían exactamente dónde tenían a cada uno de sus muertos y supieron cuidar cada tumba”, señaló Oleszek.

Los restos serán estudiados y luego serán trasladados a un cementerio local donde serán enterrados nuevamente.