Durante la cuarentena muchos se han visto reorganizando su hogar, cocinando nuevos platos o de la infancia, botando o donando ropa que ya no se ocupa y, también, desempolvando algunas fotografías antiguas.
Podemos pasar horas revisando las capturas y ahora, con las redes sociales, más de alguno ha querido compartir sus más preciados momentos con sus amigos.
La nostalgia parece ser uno de los sentimientos más recurrentes durante el encierro, es el anhelo sobre el pasado, de los eventos que hemos vivido y de las personas con las que hemos estado.
También puedes leer
Sin embargo, esto no puede mezclarse con la melancolía, la que nos puede llevar a pensar que todo tiempo pasado es mejor y sentirnos inseguros sobre el presente, según consignó el portal español ABC.
El sociólogo Fred Davis explicó al mencionado medio que los recuerdos que lo anterior se puede revertir con la nostalgia. De hecho, indicó que puede ayudar a hacernos sentir más seguros y también de consolidar nuestra identidad, pues nos conecta con nuestras raíces y valores.
Otro beneficio de la nostalgia es que ayuda a una autoestima sana y fortalece nuestra capacidad de resiliencia, que es la capacidad de una persona de enfrentar y superar la adversidad. Aquí podemos obtener una imagen positiva de nosotros al preguntarnos de qué nos sirvieron experiencias del pasado, ya sean éxitos o fracasos.
En este sentido, la nostalgia nos permite tener una continuidad en la vida, con esto, le damos sentido, de acuerdo al psicólogo Wijnand Van Tilburg del King’s College (Londres) ¿Cómo? Pues el pasado impacta a la persona que somos en el presente, construye nuestra forma de ser y de sentir.
La soledad puede ser aterradora, y otro lado positivo de la nostalgia es que nos protege de ella. Por ejemplo, si vives un quiebre amoroso un buen consejo es conectarse con recuerdos felices que te vinculen con personas que te quieren, lo que puede cambiar tu estado de ánimo. “Es una manera de gestionar tu emoción”, señala el portal español.
Finalmente, si bien la nostalgia puede evocar un sentimiento de tristeza y hasta melancolía, es fundamental enfocarse los buenos momentos destacando también el presente. Gracias a tu pasado te has convertido en la persona que eres.
