Sin duda los días de confinamiento han hecho que algunas personas recurran a formas ingeniosas de pasar el tiempo.

Tal es el caso de Chris Woodhead, un británico de 33 años que decidió realizarse un tatuaje todos los días desde que está en cuarentena.

Woodhead es fanático del arte en la piel, algo en lo que trabaja desde los 18 años y, antes de que la OMS declarara pandemia mundial por COVID-19 y en Reino Unido comenzara la cuarentena, llevaba más de mil tatuajes en distintas partes de su cuerpo.

Me encontré dando vueltas, sin saber qué hacer y comiendo toda la comida en los armarios. Entonces, la idea de tatuarme todos los días sirvió para darme un poco de dirección. Sin estructura, las personas están completamente perdidas”, explicó el británico al New York Post.

El joven aprendió a hacer sus propios tatuajes con una técnica manual conocida como “hand poking”, donde solo utiliza una aguja y tinta.

Con 42 días de encierro, Chris ya lleva 42 dibujos nuevos en su piel, desde sencillos puntos hasta tatuarse el propio COVID-19 en la piel.

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Sin embargo, este “challenge personal” podría acabar muy pronto pues el propio Woodhead reconoce que no tiene tanta piel disponible para seguir tatuándose sus figuras.

Siendo realistas, probablemente me quede un mes de espacio para tatuajes“, contó y agregó: “Si soy realmente honesto, me veo ridículo, me veo como un trozo de queso azul. Queda muy poco espacio que realmente pueda alcanzar”.

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