Gran impacto generó el caso de 109 personas que fallecieron tras ingerir alcohol artesanal en República Dominicana. Esto, porque pensaban que era un remedio eficaz contra el COVID-19.

El ministro de Salud Pública, especificó que se trataba de una sustancia llamada clerén, la cual es fabricada con más de un 50% de metanol, según consigna el medio Hoy.

“No sé cómo estos pacientes han podido llegar vivos a los hospitales”, manifestó Rafael Sánchez Cárdenas, ministro de la cartera, tras recibir los exámenes de otros 103 afectados.

Asimismo, dijo que continuarán los operativos por la Dirección General de Medicamentos, en conjunto con la Fiscalía y la Policía Nacional, para encontrar otros laboratorios clandestinos donde se fabrican esta bebida letal.

Según destaca el medio de noticias, el metanol, también conocido como alcohol de madera o alcohol metílico, se presenta como un líquido ligero, incoloro, inflamable y tóxico, Regularmente se emplea como anticongelante, disolvente y combustible.

De acuerdo a las estadísticas del gobierno, el consumo de clerén incrementó en el país ante la falsa creencia de que es un antídoto ante el COVID-19. Cabe señalar que República Dominicana registra 5.749 contagiados y 267 fallecidos por el virus.

Un caso similar ocurrió en Irán, donde al menos 194 personas han muerto por beber alcohol de categoría industrial, creyendo que podría desinfectarlos.

Según consigna el medio El Mundo, un mensaje difundido a través de las redes sociales, asegurando que el alcohol previene el contagio del coronavirus, ha jugado un rol importante en las muertes locales.