En los informes epidemiológicos entregados por el Ministerio de Salud la semana pasada, cuando Chile registraba 5.810 casos positivos a COVID-19, había una cifra que llamó la atención de los especialistas: que los hombres doblan a las mujeres en víctimas fatales.

De acuerdo al texto, de los 65 fallecidos hasta el viernes pasado, 25 eran mujeres (37%) y 41 eran hombres (63%). Sin embargo, esto no sería un caso especial de nuestro país pues en Estados Unidos, The New York Times tituló el martes pasado: “En Nueva York, el coronavirus está matando el doble de hombres que de mujeres”.

Ante esta tesis, el jefe de la Unidad de Paciente Crítico de la Clínica Indisa, Sebastián Ugarte, indicó a LUN que esto “es una tendencia que se repite a nivel mundial. La interpretación más probable es que tenga que ver con la expresión de la enzima convertidora de la angiotensina”.

El virus que provoca el COVID-19, “tiene en su interior una coronita con unas espinas hacia afuera. Esas proteínas que sobresalen a manera de espinas se conocen como protenías S, del inglés Spine”, explicó Ugarte.

“En palabras claras, la enzima convertidora de la angiotensina actúa como un receptor, es como la cerradura, y la protenía S es como la llave”, agregó el doctor. De esta forma, al unirse, el coronavirus entra a las células de nuestro organismo.

¿Y esto cómo explicaría que el virus es más dañino en hombres que mujeres? “Simple”, dice el especialista, “Porque los hombres tenemos más de estos receptores que las mujeres”.

Además, de los datos de la tasa de mortalidad, Ugarte agregó que las personas que también tiene un alto nivel de “enzimas convertidoras” son las personas hipertensas.