“Gordo del bombo”. Esa es la descripción que Pablo Bragale tiene en su perfil de Instagram y que hace unos años atrás podría haber tenido todo el sentido del mundo. Hoy no.

El argentino de 36 años enfrentaba un complejo panorama de salud: llegó a pesar 240 kilos, obesidad que no le permitía dormir y que le generaba dificultad para respirar, entre otros inconvenientes. Por si fuera poco, la gente se burlaba de él.

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Sin embargo, decidió realizar un cambio. Uno rotundo. Por lo mismo es que optó por cambiar su alimentación y someterse a una intervención quirúrgica, sólo como un inicio de su transformación. El siguiente paso fue ingresar al programa Cuestión de Peso, de la televisión trasandina, en 2017.

cuestion de peso
Pablo Bragale | Instagram

En dicho espacio, Bragale contó con la ayuda de especialistas que lo orientaron en su objetivo de llevar una vida más saludable. Tres años después, Pablo impacta con su increíble transformación: bajó 158 kilos.

Con 82 kilos y lejos de ser el “gordo” del bombo, Pablo confesó que le perdió el miedo a comer y que ahora disfruta un almuerzo o cena saludable. Su motor es estar bien.

“Hay una sociedad que no está preparada para ayudar a la gente obesa. Desde el transporte público hasta instituciones de todo tipo. Las personas con sobrepeso se empiezan a debilitar en base a su autoestima, es por eso que algunos caen y quieren la cura mágica“, graficó a Infobae, los obstáculos que enfrentan las personas con obesidad.


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Me olvidaba de contarles algo… Me entra una remera talle S y encima es de @lacatalinaok

Una publicación compartida por GordoDelBombo (@pablobragale) el 3 de Mar de 2020 a las 2:56 PST

Asimismo, agregó que “bajo ese aspecto emocional hay circunstancias ligadas a la depresión, al trauma, a la adicción a la comida, al descontrol de los impulsos o la desorganización como forma de vida”, comentó el hombre que sólo vestía de negro.

Bragale señaló también que a raíz de su condición, sufrió bullying: “La obesidad no sólo te da el problema de subir de peso, sino mucho más sudor, se te complica higienizarte bien, tienes olores feos y los demás te molestan“, sostuvo al citado medio.

¿Cómo cambió su vida? Bragale explica que lo hizo en 360 grados. “Empecé a hablar y a interactuar más. Me volví mas sociable. Empecé a salir a bailar, me mejoró el autoestima, la seguridad. Volví a confiar en mí. Antes no salía porque me miraban y la infraestructura de los lugares no ayudan”, afirmó.

“¿Está la sociedad preparada para la obesidad? No. Y el obeso tampoco está preparado, porque es el primero que niega la enfermedad”, cerró el hombre que ahora enfrenta una nueva vida.