No cabe duda que “Rodolfo el reno” es uno de los personajes más populares de la Navidad. El tierno ayudante de Santa Claus, nació en la novela corta Rudolph the Red-Nose Reindeer de Robert L. May, publicada en 1939.
El clásico infantil vendió más de dos y medio millones de copias, y posteriormente inspiró el villancico de Gene Autry, que sigue sonando en la actualidad.
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Según la letra de la popular canción, Rodolfo tenía la nariz “roja como la grana y de un brillo singular”. Pero, ¿por qué el animal adoptó ese color? Si bien es un personaje ficticio, esta particular característica también se genera en la vida real.
Una de las hipótesis planteada por un estudio de la revista New Republic, reveló que probablemente los orificios nasales de los animales estaban llenos de parásitos.
Según especifica el científico noruego Odd Halvorsen, el rojizo color de Rodolfo se debía a una infección parasitaria. Las narices de los renos están adaptadas para regular la temperatura del aire que entra y sale al respirar. Sin embargo, cuando un parásito se aloja en esa zona, se llena de sangre para combatirlo.
Asimismo, un estudio de 2012, presente en la publicación Deinsea, señala que los renos tienen un tipo de regulación vascular nasal especial, la cual funciona a través de un intercambio de calor por medio de los capilares.
De este modo, y teniendo en cuenta las bajas temperaturas a las que se ven expuestos, los renos podrían sufrir hipotermia. Esto provocaría el “recalentamiento” de su nariz, ya que la mucosa debería subir rápidamente su temperatura, lo que provocaría el color rojo en la nariz.
Rodolfo sería hembra
Otro de los mitos que ha derribado la ciencia sobre los renos de Santa Claus, es su género. Según revela un artículo del medio Huffington Post, probablemente Rodolfo era hembra.
Desde la Sociedad Zoológica de Chicago detallaron que el reno macho pierde sus astas en invierno y las hembras no. “Ellas mantienen sus cuernos hasta el verano. Estos permanecen más tiempo para que puedan proteger a sus crías de los depredadores”, detallaron.
No podía hacerle bullying
De acuerdo al clásico navideño, los demás renos se burlaban de Rodolfo por el color de su nariz. Sin embargo, ¿es posible que estos animales distinguieran las tonalidades rojas?
Según explican los investigadores de la Universidad de Exeter, estos mamíferos artiodáctilos de la familia Cervidae, no pueden distinguir el rojo, esto ya que carecen de las células oculares que los humanos usamos para detectar ese color.
“Los renos no pueden ver la luz roja o diferenciar entre rojo, naranja y verde (…) Así que no podrán distinguir el rojo de la nariz de Rodolfo o el naranja de las zanahorias”, precisó el profesor Martin Stevens, del Centro para la Ecología y la Conservación.
