Una cebra bebé se ha convertido en todo un fenómeno de las redes sociales luego que se viralizaran unas fotografías que dan cuenta de una peculiaridad en su pelaje.
Se trata de una cría llamada Tiara y que nació en la reserva Maasai Mara de Kenia, que no luce las tradicionales rayas blancas y negras de su especie, sino que es de color marrón y su cuerpo tiene puntos blancos, tal como si fueran lunares.
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Fue un guía de la reserva quien descubrió esta criatura que posee una curiosa mutación genética. De este modo, las fotos fueron publicadas por la Maasai Mara Wildlife Conservancies Association a través de su perfil de Facebook.
Pero los lunares no son su única peculiaridad, sino que también el hecho que tenga los colores invertidos. Si bien las cebras son blancas con rayas negras, este especimen es marrón con puntos blancos.
La peculiaridad del animal no son sólo los lunares, sino que tiene los colores invertidos. Las cebras son blancas con rayas negras y este animal es marrón con puntos blancos.
Según relatan en su web, esta no es la primera vez que se registra un caso similar, ya que hace algunos años nació una cebra con los colores invertidos pero igualmente conservaba sus rayas características. Según ellos mismo describen, probablemente esta mutación puede deberse al cambio climático.
Afortunadamente, la cebra no ha sido rechazada por sus padres, pese a su aspecto diferente, y la manada también la ha acogido como una más.
De acuerdo al medio Clarín, un estudio difundido a principios de junio, demostró que las rayas de las cebras eran un mecanismo que servía para regular su temperatura corporal, en vez de servir para deslumbrar a los insectos y protegerse de las enfermedades como se pensaba hasta ahora.
Los autores del estudio publicado en “Journal of Natural History”, indican que las rayas es una forma que tienen las cebras para sudar y lograr que baje su temperatura. Asimismo, las pequeñas convecciones de aire creadas entre las rayas, ayudan a la evaporación.
Eso sí, esta mutación podría convertirla en una presa fácil de los grandes carnívoros en la sabana. Las líneas de las cebras confunden a sus depredadores pues éstos no distinguen dónde inicia y dónde finaliza el cuerpo de la cebra. Tampoco les permite identificar dónde está el animal más pequeño y vulnerable de la manada.
Sobre su mutación, probablemente la madre de Tira podría tener un gen recesivo que causó un exceso de melanina en su cría.
