El realizarse la manicure con colores llamativos y con incrustación de cristal se ha convertido en el último tiempo en una moda entre las mujeres, quienes están dispuestas a gastar grandes cantidades de dinero para lucir sus manos bonitas.

Lamentablemente, muchas se dejan llevar por los bellos diseños que ofrecen los centros de belleza y no toman los resguardos suficientes para evitar algún percance.

Esto le pasó a una mujer en Australia, quien fue por una manicure, considerando uñas acrílicas y otros detalles, sin embargo, nada resultó como ella esperaba.

A llegar a su hogar en Tuggerah, comenzó a sentir un fuerte dolor en uno de sus dedos, pero decidió ignorarlo. A la mañana siguiente se dio cuenta de que el dolor había aumentado y que ahora el dedo estaba hinchado.

Tras lo extraño de la situación, se dirigió a un hospital donde le recetaron antibióticos para bajar la inflamación y el dolor, pero nada hizo efecto.

Cuando comenzó a notar que aparte de la inflamación y dolor que sentía, su dedo se estaba poniendo morado, decidió volver al centro de salud, pero esta vez a urgencias, donde le informaron que por la grave infección en su dedo necesitaba una cirugía y podía perderlo.

La razón de esta infección fue que en el centro de belleza no habían esterilizado las herramientas que se utilizaron en su manicure y las ocuparon sin limpiar en varias clientas.

Finalmente, y tras una exitosa operación, la mujer logró recuperar la movilidad y normalidad en su dedo, por lo que decidió contar su historia en Facebook, para advertir a otras personas e instarlas a que tomen las precauciones correspondientes.