Con la llegadas de las frías noches de invierno, los chilenos se las ingenian para mantenerse abrigados y en una temperatura agradable. En este contexto, los calienta camas son la mejor opción.

Pero, ¿cuál es el uso correcto que debemos darle a este tipo de artefactos? El Prevencionista de Riesgos, Luis Salamanca de la Universidad Andrés Bello y el Dr. Enrique Paris Mancilla, Decano de la Facultad de Ciencias de la Universidad Mayor, entregaron importantes recomendaciones en el matinal Muy Buenos Días.

En primer lugar, el prevencionista fue enfático en señalar que el calienta cama se utiliza solo para una fase del sueño y no es para tenerlo encendido toda la noche. Según especificó, hay que prenderlo antes de acostarse y dejarlo como máximo 10 minutos cuando estés en la cama.

Además, indicó que el artefacto debe colocarse debajo de la sabana y nunca en contacto directo con la piel. “Si siento que una lado está más caliente, o se empieza a tostar, tienes que dejar de ocuparlo a la primera sospecha”, recomendó Salamanca.

Con respecto al cuidado del calienta cama, señaló que debemos seguir las instrucciones universales presentes en electrodoméstico: no centrifugar, no estrujar y solo lavar a mano. “Es imposible estrujarlo, porque se van a cortar estos cablecitos (internos) y ahí se va a provocar una combustión de origen eléctrico”, enfatizó.

Captura TVN
Captura TVN

“Si voy a comprar un calienta cama, que sea en un lugar establecido, de una marca reconocida y que venga con un manual de instrucciones”, añadió, informando que debemos fijarnos en que el producto tenga el Sello de la Superintendencia de electricidad y combustibles.

¿Cuáles son los riesgos de usar un calienta cama?

Según señaló el doctor Enrique Paris Mancilla, los niños y adultos mayores pueden correr el riesgo de deshidratarse si se exponen durante un largo periodo al artefacto. “Un recién nacido que lo tengan toda la noche con un calienta cama, puede perder mucho líquido. Lo ideal es calentar la cama y después desconectarlo”, señaló.

En este contexto, precisó que hay que tener cuidado con las personas que tengan varices o sean diabéticos. “Pueden no sentir dolor o las quemaduras, tendría prudencia con esos casos. Podrían quemarse o acentuar una herida que está infectada”, advirtió finalmente.