Un equipo de investigadores de la Universidad de California San Francisco (UCSF) impactó al mundo de la neurociencia al crear un implante que “traduciría” las señales cerebrales en palabras.

El descubrimiento, publicado por la revista Nature, puede reproducir el habla a partir de señales cerebrales provocadas por los movimientos de nuestro rostro al hablar.

Para saber más de esta nueva tecnología, en Página 7 le consultamos al doctor Jose Luis Valdés, neurólogo y académico del Departamento de Neurociencias de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, sobre el descubrimiento de sus colegas estadounidenses.

“Lo que hicieron es probar si es que se podía tomar la actividad eléctrica de una región particular del cerebro y traspasarla a una computadora o a un aparato que pudiera generar más o menos un habla sintética. Los científicos después tomaron esta actividad y la transformaron en un habla artificial“.

Y ahondó en la tecnología: “Es bien bonito el experimento, porque lo que hicieron primero fue ver qué regiones del cerebro codificaban los movimientos que articulan el habla: la lengua, los labios y la mandíbula“.

Tras eso, la persona tenía que decir las mismas palabras pero sin emitir sonidos, y esa actividad eléctrica -que ocurre en esa condición- fue la que se pasó a una computadora que recoge estos patrones de actividad cerebral y los transforma en una voz artificial“.

científico
PASCAL GUYOT | AFP

Otro punto a destacar, según el experto, es que este avance surgió tras estudios clínicos que monitoreaban la epilepsia. “Existen sujetos que normalmente se someten a neurocirugías por epilepsia, procedimientos que son con el cerebro abierto y el sujeto consciente, y ahí les colocan unas mallas con muchos electrodos sobre el cerebro para poder detectar dónde están los focos epilépticos“.

“Entonces, estos investigadores aprovecharon esta oportunidad y les pidieron que verbalizaran una serie de frases o de palabras y después esa actividad eléctrica la transformaron en una voz artificial, que era congruente con lo que la persona intervenida estaba pensando o diciendo“.

A pesar de lo novedoso que pudiese parecer dicha tecnología, lleva bastante tiempo utilizándose. “Esto, que se llama interfaz cerebro-máquina, la verdad es que lleva bastante tiempo y había sido utilizada principalmente para cosas motoras… Podías conectar la actividad de tu corteza motora, por ejemplo, a sillas de ruedas, a un exoesqueleto, a un brazo robótico. Este descubrimiento llegó a complejizar esta tecnología“.

stephen hawking
ANDREW COWIE | AFP

-Doctor, en ese sentido, ¿esta técnica es parecida a la que utilizaba el científico Stephen Hawking?

-En principio es parecida pero es bastante mejor, porque lo que él tenía era un sistema que detectaba la actividad eléctrica en una parte de su cara y eso le permitía seleccionar palabras en un ordenador y de ahí hilar las frases. Lo cual es bien ineficiente en términos prácticos, porque te demoras bastante intentando armar lo que quieres decir.

-¿Para qué patologías serviría este descubrimiento?

-Principalmente para las enfermedades como la esclerosis lateral amiotrófica, que es la que tenía Stephen Hawking, y para personas tetrapléjicas que no puedan hablar. En general para cualquier persona que tenga una patología motora que le impida la verbalización pero que tenga indemne sus capacidades de comprensión.