Durante la década de los 90 y principios de los 2000 fueron muchos los niños que quedaron encantados con la historia de Gokú y las esferas del dragón. Dragon Ball se transformó en todo un fenómeno a nivel mundial e incluso hoy, con nuevas temporadas, sigue sumando fanáticos.
Pero el fanatismo de algunos de sus seguidores ha llegado demasiado lejos. Es el caso de Julian Low, un joven sudafricano que ha gastado más de 15 mil dólares (más de 10 millones de pesos) para parecerse a su personaje favorito de la saga animada: Trunks, el viajero en el tiempo.
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Según consigna BioBioChile esta transformación, a diferencia de muchas otras, no es un hecho de mera vanidad sino que más bien una ‘herramienta’ para combatir los fantasmas y traumas de una infancia dolorosa.
“En el colegio era como un soñador, o muy distraído. Eso me costó muchas burlas. Me veían como un ‘debilucho’, y muchas cosas de las que viví me las guardé. Podría decir que Dragon Ball fue mi escape. Dragon Ball Z es uno de los más intensos y profundos animes que yo haya visto. Cuando la gente me ve como Trunks solo veo caras de ‘¡wow!’. Me encanta”, reveló el muchacho.
Entrenamiento, alimentación, vestuario y peluquería, son parte de los gastos en los que ha incurrido Julian, quien actualmente se desempeña como personal trainer y bailarín, además de ser invitado permanente a convenciones y eventos de cosplay.
