Polo Ramírez hizo un profundo análisis sobre su salida de Canal 13, luego de que pusiera fin a su contrato con la señal durante diciembre recién pasado.
La noticia se dio a conocer mediante un comunicado enviado por la estación televisiva, donde agradecieron el trabajo de más de 20 años del periodista.
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Desde ese entonces, el profesional estaría dedicado a otros proyectos y a su participación en la radio Duna, un desafío que lo tiene entusiasmado pese a la salida del canal.
En entrevista con la revista Sábado, Ramírez aseveró que siente que perdió su “buena posición como rostro” en medio del estallido social.
“Yo no me sumé a la marcha ni a la barricada. Las observé como creo que debe hacerlo un periodista: desde el margen, considerando todos los aspectos. Yo intenté generar un espacio de diálogo, pero la gente quería otra cosa. Mi posición era bastante neutra en momentos en los que no se permitía ser tibio ni amarillo. De ahí no me moví, mientras otros periodistas se contagiaron con la fiebre del momento. Los que no nos unimos a eso, quedamos en la postura antiestallido. Yo no soy de derecha ni facho, aunque lo que yo piense políticamente es completamente irrelevante para hacer mi trabajo”, defendió.
Asimismo, comentó que siente que en muchas oportunidades no se valoró su trabajo en la señal. “Hay ciertos hechos que fueron decidores. Uno de ellos, sin duda, fue mi salida de Bienvenidos el 2021 sin mayores explicaciones; esto, luego de que los conductores tuviéramos una exposición excesiva durante el estallido social”, dijo.
Y continuó: “Estábamos muchas horas al aire sin tener las espaldas suficientes para hacernos cargo de lo que pasaba. Hasta ese momento, éramos un programa que no tocaba temas controversiales ni ideológicos. Esa era tarea del Departamento de Prensa. Nosotros teníamos una cazuela que no sabíamos cómo preparar”.
Polo Ramírez y sus últimos años en Canal 13
Consultado si esperaba más apoyo tras el movimiento social, el periodista respondió tajante: “Sí, al canal le faltó liderazgo y dirección. Martín Cárcamo fue el primero en darse cuenta de eso y se fue de Bienvenidos“.
De hecho, hay algo de lo que se arrepintió y es “no haber sido más firme y más explícito al defender mis valores, que no son de derecha, sino que propios del periodismo”.
“Nunca me explicaron por qué las ofertas interesantes eran para otros. El dejar de ser valorado por el canal, especialmente por el Departamento de Prensa, tuvo un impacto en mi ánimo y autoestima. En los últimos años, me sentí subaprovechado y que se desconocía mi trayectoria. Lo hablé con quienes correspondía, pero nunca me dieron las razones concretas. Jamás me dijeron ‘no estamos contentos con tu trabajo, lo que me daba mucha impotencia”, sostuvo.
En ese contexto, el exintegrante de Canal 13, comentó que desde la estación el último período sí le ofrecieron proyectos, pero nunca los consideró porque no correspondían “para esta etapa de mi carrera”.
“Siempre estuve en los espacios y horarios que me pidieron, pero pedí un poco de consideración. A mí no me interesa ser el mejor en nada ni el protagonista. Nunca he tenido la pulsión por ganar siempre y tal vez eso sea un problema cuando estás en televisión”, cerró.
