En abril llega a Santiago de Chile El Diván Rojo, obra de teatro escrita por el autor de Yo soy Betty, la fea, Fernando Gaitán. Sus protagonistas, además, son recordados actores de la popular telenovela colombiana: Natalia Ramírez (Marcela), Lorna Cepeda (Patricia) y Julio César Herrera (Freddy).
Para esta apuesta, el recordado mensajero de Ecomoda se convierte en un prestigioso sexólogo, el doctor Luis Mario Dávila, quien debe emplear todos sus conocimientos y estrategias cuando atiende en su consultorio a Carla Santamaría.
La paciente es justamente la ‘peliteñida’, ahora convertida en Carla Santamaría: una obsesiva de los hombres y el sexo, que busca el camino que la lleve a amar a una sola persona.
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“La tercera parte la hago yo. Es mi rol, y es una gran conclusión acerca de lo que sucede con las parejas y la comunicación entre ellas, que muchas veces no es la mejor”, indicó Natalia Ramírez en conversación con Página 7.
“Además de ser muy divertida y bien actuada, tiene una reflexión final muy profunda. A través del humor se pueden resolver los problemas de pareja“, añadió.
Según la actriz y productora del montaje, “esta es una forma interesante de abordar temas que no se hablan, ya sea por tabú o porque no se sienten cómodos. Esta obra abre esa ventana para que las parejas puedan comunicarse y abordar esos temas”.
Los protagonistas hablan de la obra
Al explicar su papel en la obra, Julio César Herrera dijo que es “el sexólogo que está dispuesto a enseñarle a la paciente cómo se ama a una sola persona. Es un hombre que se ha destacado en estas luchas de enseñarles a las mujeres ‘hombreriegas’ cómo llegar al corazón de una sola persona, y no varias”.
“Yo soy la mujer ‘hombreriega’ a la que le gustan mucho los hombres”, apuntó Lorna Cepeda, quien interpreta a Carla Santamaría.
“Ella va con el mejor sexólogo que existe porque necesita una terapia, necesita ayudarse para que dejen de gustarle todos los hombres y poder amar a uno solo para pasar el resto de sus días con él”, añadió.
Según el actor, se trata de “una reflexión sobre el tema de las relaciones y cómo cultivamos la vida en pareja. ¿Por qué llega un momento en que nos aburrimos? ¿Dónde se pierde la creatividad o el momento de decirle al otro un ‘te amo’? ¿Por qué nos vamos a hacer cualquier banalidad en vez de dar un abrazo, un beso o una caricia a la persona con la que compartimos la vida?”, cuestionó.
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Cómo llega El Diván Rojo a Chile
Natalia Ramírez contó cómo se dio la posibilidad de llegar a nuestro país. “Estamos haciendo una gira por Sudamérica y, por supuesto, Chile no podía quedarse atrás. Renato, que es nuestro empresario en Perú, tiene un socio en Chile, y de esa manera pudimos entrar al mercado chileno para hacer esta función en Santiago”, explicó.
“Teníamos solo un día para hacer la obra allí, y lo logramos en el Teatro Coliseo. También logramos una alianza con Punto Ticket para vender las entradas vía internet, y así tener esta maravillosa función el 20 de abril, a las 20 horas“, detalló.
“Vamos a llegar un poquito antes, y algunos se van al día siguiente porque seguiremos hablando con diferentes medios. Ojalá poder estar más esta vez, porque Lorna y yo solo hemos estado en hoteles y estudios, sin visitar mucho de Santiago. Veremos si está esa opción”, apuntó Julio César sobre su arribo a suelo nacional.
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Qué esperan de la recepción en nuestro país
“Tenemos los mejores deseos. Siento que los chilenos quieren vernos y nosotros ver a los chilenos, así que ojalá esa sala esté llena y poder agradecerles tanto cariño y amor que nos han tenido durante 24 años“, sostuvo la recordada ‘Marce’ de Yo soy Betty, la fea.
“Es un objetivo importante, al menos para mí, agradecer al pueblo chileno tanto amor y tanta acogida”, agregó.
Herrera, por su parte, dijo que “siempre el teatro será esa puerta donde podemos conocernos, y esta vez podemos llegar con una obra de carácter universal. Nada más universal que las relaciones de pareja, y qué mejor que sentir esa calidez del pueblo chileno en ese teatro. Vamos a ver qué va a ocurrir”.
Lorna cerró asegurando que esperan que el público vaya y se divierta, “que lo pasen bien, analicen y reflexionen un poco sobre su propia pareja, o su manera de pensar respecto a su pareja. Me parece algo maravilloso. Qué lindo poder compartir, verlos y estar ahí con los chilenos”.
