La cantante Rihanna, la estrella invitada este año para el espectáculo del descanso del Super Bowl, aseguró que la maternidad fue lo que le dio fuerzas para aceptar participar en un escenario tan “intimidante” como ese.

“Tenía tres meses de posparto y me preguntaba, ¿debería estar tomando decisiones cómo estás ahora? Tal vez me arrepienta después”, confesó en la conferencia de prensa con motivo de su participación en los eventos de la gran final del fútbol americano.

Pero fue precisamente la maternidad, dijo, lo que le dio la certeza de que era capaz de enfrentar un escenario tan grande como el del evento deportivo, y eso que lleva siete años sin actuar.

“Cuando te conviertes en madre, algo pasa que sientes que puedes hacer cualquier cosa; por mucho miedo que me diera, había algo estimulante en el reto que esto supone“, contó la cantante de 34 años.

Rihanna también aseguró que era importante para ella mostrar en uno de los escenarios más importantes del mundo, que una mujer negra de un país como Barbados podía llegar tan lejos.

Represento a inmigrantes de mi país, a mujeres negras de todo el mundo, es importante que la gente vea que hay posibilidades y es un honor para mí ser parte del show este año“, comentó.

Cabe recordar que en 2018 Rihanna rechazó el ofrecimiento de formar parte del espectáculo que hoy encabeza en apoyo a la comunidad afroamericana, en solidaridad al jugador Colin Kaepernick de los 49ers de San Francisco.